La reciente implementación de una línea continua de color rojo en la mediana del Corredor del Nalón ha generado debate en cuanto a su validez jurídica y su interpretación en términos de normas de circulación.
La Dirección General de Tráfico (DGT) ha optado por esta medida como parte de su estrategia para reducir la siniestralidad en la vía, acompañada de una disminución de la velocidad máxima permitida y la futura instalación de radares fijos.
1La línea roja y su peculiaridad
Esta señalización horizontal de color rojo, una rareza en el contexto de las carreteras españolas, busca resaltar la prohibición de adelantar e invadir el carril contrario. Aunque visualmente impactante, algunos expertos, como Rubén Castro, presidente de la Unión de Empresarios de las Autoescuelas de Asturias (UEAS), señalan que esta medida carece de una clara validez jurídica.
A diferencia de la tradicional doble línea continua de color blanco, la línea roja sería más una herramienta para enfatizar el peligro que una norma legal estricta.