La Península Ibérica alberga algunas de las más bellas carreteras del mundo. Un verdadero paraíso de curvas tanto por las propias carreteras en sí como por los parajes y paisajes por los que atraviesa.
Paraíso de curvas, disfruta del paraje
Disfrutar del trayecto es una forma de estar de vacaciones, cada vez son más los que apuestan por road movies en los que sus vacaciones se basan en viajar y disfrutar de cada milímetro de asfalto que pisan. Carreteras que se han convertido en verdaderos santuarios de los aficionados a la conducción en general. Ya sean motos o coches. Una selección realizada por la aseguradora Mapfre.
M-601: Bola del Mundo (Madrid)
En la Sierra de Guadarrama se encuentra la Bola del Mundo, la montaña más occidental del cordal montañoso de Cuerda Larga. La carretera M-601 se inicia en Collado Villalba hasta el Puerto de Navacerrada a más de 2.250 metros de altitud.
Las torres tan características que se encuentran en la montaña se alzaron en 1959 para transmitir TVE en la meseta central. Tras el apagón analógico en 2010, solo se usa para la radio.
DP-2205: Los mejores acantilados (Galicia)
Esta vía bordea los acantilados de Herbeira, en la costa de A Coruña, alcanzando los 613 metros sobre el nivel del mar. La ruta por esta carretera llena de curvas y rectas te llevará hasta el santuario San Andrés de Reixido, también conocido como San Andrés Cabo do Mundo. Tal como dice la leyenda hay que peregrinar al santuario “A San Andrés de Teixido vai de morto quen non foi de vivo”. Quien no visite San Andrés en vida lo hará muerto convertido en lagartija, dicen.
MA-2101: Sa Calobra (Mallorca)
La carretera autonómica MA-10 parte una carretera comarcal espectacular, considerada entre las más difíciles de España. Es la MA-2141, conocida como la carretera de Sa Calobra. La carretera MA-2141, en la isla de Palma de Mallorca, con solo 14 kilómetros de recorrido, está repleta de curvas cerradas y enlazadas, sobre precipicios cortados a pico. Otro paraíso de curvas.
Hay que tener especial cuidado ya que la calzada que desciende hasta la playa de Sa Calobra es estrecha, sin línea central, pocos quitamiedos y tráfico de ciclistas. Antes de llegar al destino, cicatriza el abrupto paisaje del norte insular a través de 12 curvas de ciento ochenta grados y una de trescientos sesenta, conocida como el nudo de la corbata.
A-395: La carretera más alta (Sierra Nevada)
En Sierra Nevada, concretamente a la carretera que dirige al Pico Veleta, alcanza los 3300 metros de altura. Convirtiéndose así en la carretera más alta de España y la vía asfaltada que alcanza mayor altura de Europa.
Aunque puede ser transitada sin problemas. Debido a su altura, los últimos kilómetros hasta el Pico Veleta solo pueden recorrerse si se dispone de un permiso especial concedido por las autoridades del Parque Natural de Sierra Nevada.
GC-200: Las 365 curvas (Gran Canaria)
La carretera con curvas para cada día del año. El tramo de la carretera GC-200 que une Agaete y La Aldea de San Nicolás, en la costa occidental de Gran Canaria, es uno de los más arriesgados de España. Hasta 1970, este camino que bordeaba el perímetro de la isla carecía de vallas protectoras.
La preciosa carretera cuenta con dos frentes sobre el mar, con acantilados que oscilan entre los 200 y 900 metros de altura y curvas con poca visibilidad. Por este motivo, a final del 2022, está prevista la finalización del doble túnel de Faneque. Una alternativa al paso por el risco de la GC-200, que en moto puedes disfrutar mucho.
A-1702: Silent route (Teruel)
La Ruta del Silencio se encuentra en las comarcas de Maestrazgo y Andorra – Sierra de Arcos. Una carretera, paraíso para los moteros, de 63 kilómetros que invita al slowdriving. Muchas curvas, sin apenas tráfico y vistas de ensueño. Atraviesa los paisajes más indómitos, como los Órganos de Montoro, las parameras ejulvinas, el puerto de Cuarto Pelado o los Estrechos del Guadalope.
TF-21: Oratava a Granadilla (Tenerife)
La carretera tinerfeña parte de la TF-271, en Cuesta de la Villa y finaliza en la TF-28 en Granadilla. Con una longitud de 82,9 km y una altitud máxima de 2.366 metros, la TF-21 es una de las vías que ofrece mayor variedad de paisajes como el Parque Nacional del Teide, el Parque Natural de la Corona Forestal o el Monumento Natural de la Montaña Colorada.
La carretera se introduce por la ladera de Santa Úrsula en el Valle de la Orotava, donde se encuentra el Mirador de Humboldt donde podrás disfrutar de una panorámica del valle con el Municipio de Los Realejos, el Puerto de la Cruz en la costa y la Orotava a los pies del mirador. Un verdadero paraíso de curvas.