La historia del Skoda Superb se remonta a 1934, año en el que este nombre apareció por primera vez en documentos internos de la empresa el 22 de octubre. La producción comenzó en la primavera de 1935, y en 1949 habían salido de la lñinea de producción casi 900 unidades del Superb en cinco variantes: además de los modelos 640 Superb de seis cilindros y Superb tipo 902, también llegaron el Superb tipo 913, el Superb 3000 OHV tipo 924 y el Superb 4000 tipo 919 con motor V8.
Ya en 2001, el fabricante de automóviles de Mladá Boleslav reintrodujo la denominación del modelo y presentó la primera generación del moderno Skoda Superb, marcando su regreso al segmento de los coches familiares grandes.
11 de septiembre de 2001
Con 4.803 mm de longitud, 1.765 mm de anchura y 1.469 mm de altura, el Skoda Superb sorprendía a los asistentes del IAA de Frankfurt. La gama de motores incluía tres motores de gasolina y dos diésel. El propulsor de cuatro cilindros de 2.0 litros rendía 115 CV, los otros motores de gasolina eran un cuatro cilindros turbo de 1.8 litros con 150 CV y la versión más alta era un V6 de 2,8 litros con 193 CV, con el que podía alcanzar los 237 km/h. Por su parte, TDI de 1.9 litros con 130 CV ofrecía un consumo medio de 5,7 l/100 km. Otra alternativa era otro TDI de seis cilindros de 1.5 litros y 155 CV.
Otro de sus puntos fuertes era su nivel tecnológico, contando con numerosas características de seguridad: el sistema de frenado venía con ABS y EDS de fábrica, y el control antideslizantes ASR también venía de serie. Además, incorporaba dos airbags frontales y dos laterales en los asientos delanteros.
La producción del Skoda Superb comenzó el 1 de octubre de 2001 en la planta de Kvasiny. A finales de ese año se habían fabricado 581 vehículos, antes de que en la primavera de 2002 se entregaran las primeras unidades.
En estos 20 años de vida y tres generaciones a sus espaldas, se han conseguido comercializar alrededor de 1,5 millones de unidades del Superb.
