La historia de SsangYong es bastante larga. Fundada en 1954, ha vivido casi 70 años de altibajos en la industria automotriz. Los últimos años han sido particularmente difíciles, con problemas financieros que casi la llevaron al colapso.
Pero el verano pasado, KG Group se hizo cargo de la compañía y, como resultado, el nombre SsangYong está en camino de desaparecer.
KG Group, una compañía también surcoreana dedicada a la industria química/siderúrgica, y se quedó con la marca (y con su deuda), que compró a la compañía india Mahindra. Esta última controlaba casi el 75% de SsangYong, pero tras el acuerdo, su participación actual apenas alcanza el 10%.
1Un nombre para el recuerdo
El Korea Herald comentó en su edición más reciente que: “El nombre Ssangyong Motor trae buenos recuerdos, pero también tiene una imagen dolorosa. A partir de ahora, todos los coches Ssangyong saldrán al mundo bajo el nombre de KG”.
KG compró el fabricante coreano por 950 mil millones de wones en agosto de 2022, lo que vienen siendo algo más de 701 millones de euros. Este cambio acordado por la junta ponía fin a casi dos años de incertidumbre.
Ssangyong se declaró en quiebra, para vivir una reestructuración en diciembre de 2020, después de que el propietario anterior, Mahindra, retirara todas las inversiones, al no haber podido cambiar el negocio y su rumbo tras una década bajo su paraguas.
