Allá por principios de la primera década del siglo XXI existía una rivalidad entre Mitsubishi y Subaru, que tuvo lugar tanto en los rallyes como en la calle. Los protagonistas no eran otros que el Mitsubishi Lancer EVO y el Subaru Impreza WRX STI. Don auténticas leyendas para cualquier petrolhead.
El EVO desaparecería definitivamente antes del comienzo de la nueva década, mientras que su archirrival, ya separado de la gama Impreza y rebautizado como WRX STI ha seguido durante muchos años más cosechando una buena aceptación en algunos mercados como el estadounidense o el japonés. De nosotros se despidió definitivamente en 2019, con una serie final Final Edition de la cual sólo llegaron 8 unidades a España.
Ahora toca decir adiós de manera definitiva, no sin antes poner en liza una serie especial que ha sido una de las grandes sorpresas del Salón de Tokio por parte de la marca japonesa. El WRX STI S210 se basa en el WRX S4 STI Sport R EX, pero presenta una serie de cambios inspirados en el coche de competición WRX NBR Challenge que compite en la carrera de 24 horas de Nürburgring.
El WRX STI S210 tiene 300 CV, cambios en el chasis… y cambio automático
Conviene reseñar que el modelo que se vende en el mercado americano es WRX ‘a secas’, del cual hay diferentes niveles de equipamiento. Este modelo cuenta con un motor de 2.457 centímetros cúbicos que, como es tradición, tiene los cuatro cilindros en disposición bóxer, es decir, enfrentados entre sí. Según el comunicado, la potencia se ha llevado hasta los 301 CV gracias a un nuevo sistema de admisión, un conducto pre-turbo, un escape con un silenciador de baja presión y una ECU revisada. El par del WRX STI S210 se mantiene estable en 375 Nm, aunque ofrece una respuesta más lineal.
La potencia se envía a las cuatro ruedas exclusivamente a través de una caja de cambios automática de tipo CVT, un conjunto denominado Subaru Performance Transmission. Este ha sido el punto más sorprendente, pues la potencia es exactamente la misma que ofrecía el WRX STI que se vendió en España, y que allí no estuvo disponible. Eso sí, en nuestro caso, siempre se empleó una caja de cambios manual.
Las mejoras del chasis del WRX STI S210 incluyen amortiguadores controlados electrónicamente puestos a punto por ZF con resortes helicoidales revisados. La potencia de frenado también se ha mejorado gracias a discos perforados y ventilados en las cuatro ruedas, pastillas de freno especiales y pinzas de freno Brembo de seis pistones en la parte delantera. Las llantas también son nuevas, conocidas como STI Flexible Performance, de 19 pulgadas y fabricadas por BBS. Están calzadas con neumáticos deportivos Michelin de 255 milímetros de ancho por y un perfil 35.
No obstante, lo que más llamará la atención de propios y extraños será el kit aerodinámico incorporado por el WRX STI S210, que incluye un espectacular alerón sobre la tapa del maletero que deja en evidencia el empleado por ‘nuestro’ WRX STI. No falta un faldón en el paragolpes delantero, taloneras laterales y un generoso difusor bajo el paragolpes trasero. Los emblema STI y la insignia S210 terminan por redondear un conjunto que no deja indiferente.
Por último, en el interior sobresalen los asientos Recaro que recuerdan a los usados en competición (aunque equipan regulaciones eléctricas), con tapicería de cuero Nappa y el respaldo fabricado en carbono para reducir el peso. Aquí, además, aparece una placa con el nombre de la versión y la unidad correspondiente a las 500 que se van a fabricar. En primavera se darán más detalles en este sentido, pues no se sabe si todas serán para Japón o si algunas se exportarán a otros mercados.