Las acciones de Tesla se desplomaban más de un 3% durante los primeros compases de la sesión bursátil en Estados Unidos después de que el proxy (empresa de asesoramiento, normalmente, de inversores institucionales) Glass Lewis haya recomendado a los accionistas, de cara a la próxima junta general que tendrá lugar el 13 de junio, que rechacen el paquete salarial de 56.000 millones de dólares que se le otorgó en 2018 al fundador de la automovilística, Elon Musk.
El asesor dijo que la compensación salarial fue «excesiva» y que generó preocupaciones sobre el tamaño de la participación que Musk tendría de Tesla. El empresario ya posee acciones por casi el 13% de la compañía.
Glass Lewis también destacó la «serie de proyectos que consumen extraordinariamente el tiempo» que actualmente involucra a Musk, incluida su propiedad y posterior revisión de la plataforma de redes sociales X, anteriormente Twitter, que adquirió por 43.000 millones de dólares (39.500 millones de euros) en 2022.
La negativa de los accionistas llevaría a Tesla a un problema mayor
El motivo de este cambio de opinión del proxy llega tras la sentencia de un tribunal de Delaware, que en enero dictaminó que el paquete salarial del empresario de origen sudafricano contravenía la ley porque la junta directiva de Tesla no reveló adecuadamente los posibles conflictos de intereses entre Musk y la organización.
Una negativa de los grandes accionistas de Telsa enviaría a la junta de nuevo el esquema de compensaciones y, potencialmente, reduciría las compensaciones que recibe Elon Musk de la empresa que fundó.
En estos momentos, Musk tiene cerca del 20% del control de las acciones con derecho a voto de Tesla, aunque ya ha indicado que su intención es alcanzar el 25% para mantener los proyectos de desarrollo de inteligencia artificial dentro de la estrategia del fabricante.
Aún así, las acciones de la marca se han multiplicado por ocho
La petición de Glass Lewis se une a la recomendación (también negativa) de otro gran proxy, ISS, donde alegaron hace unas semanas que en las empresas estadounidenses «existen pocos casos» en los que sus directivos reciban remuneraciones como la de Elon Musk.
Desde finales de 2018 (cuando se aprobaron las remuneraciones) las acciones de Tesla se han multiplicado aproximadamente por ocho, añadiendo cerca de 500.000 millones de dólares (algo más de 460.000 millones de euros) en valor de mercado.
Los títulos de la compañía de California retrocedían en la jornada de este pasado lunes más de un 1,8% en el Nasdaq estadounidense, hasta cotizar sobre los 175,9 dólares (unos 162 euros por título) después de haber perdido casi un 30% de capitalización de mercado desde enero.