Sumar, la formación que lidera Yolanda Díaz, propone en su programa electoral una serie de medidas para reducir las emisiones de CO2, entre las que incluyen la prohibición de que circulen vehículos de combustión a partir de 2040.
Esta propuesta de Sumar busca reducir «drásticamente» las emisiones y se adelantaría hasta en 10 años a los compromisos de la Unión Europea, que contempla prohibir la venta de coches con motores de gasolina, diésel e híbridos en 2035 (salvo los propulsados por e-fuel) para que su eliminación definitiva llegue aproximadamente en 2050, teniendo en cuenta que la vida media de un automóvil ronda los 15 años.
Esta medida de Sumar se concretaría dentro de un plan nacional de transición energética con el que se pretende reducir la dependencia externa de combustibles fósiles, democratizar el sistema de producción y distribución energética y abaratar los precios de la energía.
Además, también plantean la creación de un impuesto a los bienes y servicios de lujo que generen un gran volumen de emisiones, que afectaría a los vehículos de lujo, aviones privados, grandes yates y vuelos frecuentes peninsulares en clase ‘business’.
Por otra parte, desde Sumar también han anunciado que impulsarán medidas que sigan avanzando en la electrificación del parque de automóviles y también que promulgarán una Ley de Financiación del Transporte Colectivo, Público o de Bajas Emisiones, con lo que se pretende avanzar en la movilidad sostenible y reducir el uso de vehículo privado, sobre todo en las ciudades.
Otras propuestas de Sumar
Entre las propuestas relacionadas con la energía, el programa de Sumar también recoge la de crear un nuevo sistema tarifario eléctrico progresivo y obligar a las compañías eléctricas a separar la actividad de distribución de las de generación y comercialización.
En materia de descarbonización, también plantean un impuesto a los beneficios extraordinarios de la industria fósil y la posibilidad de detener las nuevas inversiones y subvenciones al gas natural y otros combustibles fósiles. así como la prohibición de la publicidad y los patrocinios de combustibles fósiles.
Por otro lado, Sumar se compromete a crear un fondo público de inversión en energías renovables, similar al Fondo Soberano Noruego del Petróleo, cuyo objetivo sea financiar procesos de desarrollo industrial en la España vaciada y en el mundo rural, así como mejorar la dotación de servicios públicos de estos territorios.
En lo que se refiere a energías renovables, la formación propone que el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima se adapte a los «nuevos objetivos europeos», de modo que se disponga de una potencia de, aproximadamente, 148.000 megavatios (MW) en 2030, frente a los 105.000 del plan.