Ante tus ojos tienes el primer Suzuki Jimny Pick-Up, una criatura que no ha sido desarrollada por la propia firma nipona, sino por un concesionario en Nueva Zelanda. Sin embargo, todo el trabajo realizado en este pequeño todoterreno de 3,48 metros de largo ha sido aprobado por Suzuki, de forma que esta conversión mantiene la garantía original del fabricante.
Este llamativo vehículo comienza su vida como un Suzuki Jimny JX, es decir, la versión más básica de la gama, a la que directamente se le corta la parte trasera de la carrocería, eliminado así los dos asientos posteriores. Esto ha sido posible gracias a que el Jimny utiliza un chasis de largueros, sobre el que ahora asientan una caja trasera fabricada en acero, cuyos laterales basculan para facilitar el acceso a esa zona de carga. Además de todo este trabajo, se instala una bola de remolque.
Mantiene su efectivo sistema de tracción
Al tratarse de la versión más sencilla del Jimny nos encontramos con detalles como unas llantas de acero de 15 pulgadas con neumáticos 195/80 R15, en su interior no hay pantalla táctil ni climatizador automático… Ahora bien, este funcional vehículo mantiene su sensacional sistema de tracción a las cuatro ruedas con reductora, que le permitirá llegar a casi cualquier zona de trabajo donde sea reclamado.
No cabe duda de que además de perder dos asientos, también se suman otros inconvenientes, como que dicho concesionario cobra la friolera de 12.000 dólares de Nueva Zelanda por esta conversión. Y es que eso vienen a ser como unos 6.480 euros al cambio actual, que no es precisamente poco dinero.