Aunque la oferta inicial ya era bastante completa, pues el nuevo Vitara combinaba desde el principio los dos tipos de tracción -delantera o total- con dos motores de 120 CV -un gasolina 1.6 atmosférico de la propia Suzuki y un 1.6 turbodiésel procedente de Fiat-, en la firma japonesa amplían ahora las posibilidades de elección con una moderna transmisión automática -ver cuadro adjunto- y una variante de corte deportivo que estrena motor de gasolina. Y es que el Vitara S, que acabamos de conducir en las inmediaciones de Madrid, acoge bajo su capó un propulsor 1.4 dotado de inyección directa y turbocompresor, perteneciente a la nueva familia Boosterjet creada por Suzuki, y que también incluye el 1.0 Turbo tricilíndrico de 111 CV que debutará en el nuevo Baleno.
El 1.4 Turbo que nos ocupa esta vez rinde 140 CV a 5.500 rpm y presume de un par máximo de 22,4 mkg entre 1.500 y 4.000 vueltas, cifras muy prometedoras que después, sobre el asfalto, se traducen en un excelente agrado de marcha, pues funciona con suavidad y hay muy buena respuesta desde bajo régimen. Además, las dos cajas de cambio disponibles tienen seis marchas, tanto la manual como la automática, por la que hay que pagar 1.500 euros más y que apenas altera las prestaciones -con ambos tipos de transmisión se anuncian 10,2 segundos en el '0-100' y 200 km/h de velocidad punta- o el consumo: 5,4 l/100 km el Vitara S manual y 5,5 el automático.
Solo con tracción total
El nuevo motor sólo se combina con la tracción total -no sería mala idea ofrecerlo también en versión 2WD- y con el deportivo acabado S, de apariencia muy diferenciada porque incorpora de serie llantas de 17 pulgadas en negro, retrovisores plateados y una parrilla frontal tomada del 'concept car' iV-4, con cinco secciones que parecen superponerse. Y ese aspecto deportivo sigue dentro, pues Suzuki personaliza el habitáculo con una tapicería de tejido y cuero, detalles rojos en volante, cambio, asientos o instrumentación, y pedales en aluminio. Lástima que el aspecto de algunos plásticos sea algo pobre, pues el acabado en general es bueno y se respira, incluso, cierto refinamiento.
Y en el lado positivo hay más cosas, como un interior amplio, un maletero de 375 litros que figura entre los mejores de la clase y, sobre todo, un equipo de serie francamente completo: botón de arranque sin llave, climatizador, sensores de parking delante y detrás, pantalla táctil de 7 pulgadas con navegador y cámara trasera, control de velocidad adaptativo, asientos calefactables, faros LED de cruce, levas de cambio en la versión automática…
Según Suzuki, sumando todos los descuentos -incluido el PIVE- hay ahora un Vitara S desde 20.110 euros.
Cambio automático TCSS. Doble embrague para el Vitara 1.6 DDiS 4WD
La segunda sorpresa en la gama Vitara tiene que ver con la versión diésel 1.6 DDiS dotada de tracción total AllGrip, disponible hasta ahora sólo con cambio manual y que a partir de este momento también se ofrece con transmisión automática. Pero no se trata del cambio automático de seis marchas ofrecido en la versión 1.6 de gasolina con tracción delantera, sino de la nueva caja TCSS (Twin Clutch System by Suzuki), con doble embrague interno para suavizar el funcionamiento y lograr saltos entre marchas más rápidos.
Tiene seis velocidades, eleva un poco el consumo frente al Vitara 1.6 DDiS 4WD manual -sube de 4,2 a 4,5 litros- y monta levas en el volante. Con acabado GLE, el precio es de 24.610 euros -21.110 incluyendo todos los descuentos posibles-, y de 26.560 -23.060 con descuentos- si preferimos el completo GLX
