¿Eres de los que se queja de lo que cuesta la gasolina? No estás solo. El precio del combustible siempre ha sido un tema de preocupación para los conductores. Sin embargo, desde el pasado 6 de marzo, la tendencia ha dado un giro inesperado con una nueva bajada que supone un respiro para los bolsillos de los españoles.
Los importes del diésel y la gasolina llevan semanas cayendo, y lo han hecho en un contexto de descenso de otros productos básicos como, por ejemplo, el aceite de oliva. ¿Cómo afecta este cambio a los consumidores? ¿Será una tendencia estable, o un simple espejismo en el mercado? En este artículo, lo analizamos.
5La evolución del importe desde la guerra de Ucrania
Desde el comienzo de la guerra en Ucrania en febrero del 2022, los precios de los carburantes han experimentado una montaña rusa. Aunque el diésel sigue ligeramente por encima de su valor previo al conflicto, cuando costaba 1,479 €/L, la gasolina ha bajado hasta situarse por debajo de los 1,591 €/L que valía entonces.
A pesar de las fluctuaciones, los precios actuales están lejos de los picos históricos de julio del 2022, cuando la gasolina alcanzó los 2,141 €/L y el diésel, los 2,1 €/L. Además, el diésel ya lleva dos años consecutivos siendo más barato que la gasolina, volviendo a la normalidad previa a la guerra, cuando el gasóleo solía ser la opción más económica.
