La marca de coches eléctricos de Elon Musk se encuentra nuevamente en el ojo del huracán y otra vez es por su Tesla Cybertruck. En esta ocasión, el pick up eléctrico ha sido objeto de un ataque por parte de activistas climáticos en Hamburgo, Alemania. Durante la presentación del vehículo, un grupo de ecologistas roció este automóvil con pintura naranja al grito de «unos pocos ricos conducen blindados hacia el desastre».
Sin embargo, el incidente sirvió para demostrar la resistencia y durabilidad de la Cybertruck, que salió ilesa del ataque sin abolladuras ni daños permanentes. El grupo Letzte Generation, conocido por sus protestas radicales, reivindicó la acción a través de un comunicado en su sitio web y en un hilo de Twitter. Hendrik Fauer, ingeniero y miembro del grupo, criticó duramente a esta camioneta, calificándola de «un derroche sin sentido».
¿Por qué motivo fue atacado este Tesla Cybertruck?
Según Fauer, la pick-up eléctrica pesa casi tres toneladas, lo que conlleva un consumo de energía excesivo. Además, señaló que la carrocería llena de bordes afilados es un peligro para la seguridad, tanto de los peatones como de otros vehículos en la carretera. Los activistas sostienen que la Tesla Cybertruck es un símbolo de las políticas antisociales de las últimas décadas, donde «unos pocos ricos conducen blindados hacia el desastre, arrastrando a todos con ellos».
Otra portavoz del grupo criticó a los multimillonarios influyentes que cumplen sus fantasías a costa de todos los demás y luego ganan dinero con ello. Estos activistas han centrado previamente sus protestas en la planta de Tesla en Berlín, que también ha sido blanco de ataques por su construcción y ampliación. La fábrica de vehículos eléctricos viene siendo muy criticada desde su creación.
Tesla es un objetivo principal para los activistas ambientalistas
Elon Musk ha sido un objetivo frecuente de los ecologistas radicales. Durante la construcción de la planta de Gruenheide, los activistas sabotearon la red eléctrica incendiando una torre de alta tensión, lo que obligó a detener la producción temporalmente. Musk respondió calificando a los saboteadores de «ecoterroristas más tontos de la Tierra», argumentando que Tesla produce coches eléctricos con buenos objetivos ambientales.
A pesar de las protestas, han recibido recientemente la aprobación para ampliar la planta que tiene en Alemania, lo que permitirá incrementar la producción a un millón de coches al año y también producir baterías. Sin embargo, la Tesla Cybertruck, con su imponente tamaño y diseño futurista, enfrenta desafíos en el mercado europeo. La pick-up eléctrica no cumple con las regulaciones europeas debido a su carrocería de acero inoxidable con bordes afilados. Para comercializarla en Europa, tendría que modificar su diseño, lo que podría ser costoso y complicado.
