La felicidad y comodidad de un viaje se puede ver truncada por las imprevistas tormentas torrenciales y eléctricas, que con demasiada frecuencia se viene produciendo en los últimos años. Estar preparado para la conducción en esta condiciones y tener el coche en perfecto estado, es importante para solventar estas situaciones con éxito.
4Seguridad, prudencia y moderación al volante
En caso de tener que seguir conduciendo con la tormenta, la practica moderada de la velocidad, asegurar las distancias de separación entre vehículos, asistir la conducción con los alumbrados necesarios si fuese preciso, colocar elementos de tracción suplementaria, todo ello con la calma y el tiempo recurrentes es la mejor actitud.
Las condiciones de la calzada se ven alteradas por la humedad, la lluvia, la nieve y el granizo. Es decir el hidroplaneo puede estar presente, el hielo también, y es ahí donde aumentan las distancias de frenado y detención, se pierde adherencia y el descontrol del coche resulta mas plausible.
El coche te protege frente a la caída de rayos, pudiera ser dañado por el impacto, pero estas libre de un descarga, por el fenómeno de jaula de Faraday. El interior del coche esta aislado por los asientos y los neumáticos. No obstante busca refugio lejos de antenas, puntos elevados o arboles, que son atrayentes de las descargas atmosféricas eléctricas.
