La cuarta generación del Prius se presenta con una intención clara, recuperar el dominio de los híbridos. Y ¿como hará esto?, muy fácil, aprovechando las fortalezas y los logros de sus predecesores marcando una nueva referencia en cuanto a ahorro de combustible, emisiones y eficiencia. Cada generación de Prius ha introducido mejoras en estos ámbitos, pero el nuevo modelo, según Toyota, aspira a dar el mayor paso adelante en lo que a rendimiento se refiere.
Más espacio interior y un diseño arriesgado
Al hablar del Prius, la marca incide sobre todo en la gran eficiencia de su nuevo sistema híbrido y en unas prestaciones hasta ahora desconocidas en él. Para lograr un desarrollo único en eficiencia, han trabajado concienzudamente la parte aerodinámica de la carrocería. Al igual que su hermano Mirai, con el que comparte muchos rasgos, su silueta se ha transformado viéndose ahora extremadamente puntiaguda.
En su frontal destacan los nuevos faros de vértices muy marcados, traídos directamente de la gama Lexus, dotados con LEDs para todas sus funciones. También tiene un perfil más bajo, asegurando que el emblema está a la misma altura que el del GT 86. El extremo superior del coche también ha sufrido cambios, adelantando el techo y creando una superficie acristalada mucho más alargada y clara. Las líneas de estilo se han resaltado y el alerón trasero tiene un ángulo inferior con respecto al portón.
Comparándolo con la generación anterior, el Prius 2016 crece 6 centímetros de largo, 1,5 de ancho y es 2 centímetros más bajo. Este cambio en sus medidas, ha permitido a los ingenieros de Toyota diseñar un interior más espacioso tanto para los pasajeros como para el equipaje, aunque no nos indican cuanto volúmen de maletero y espacio interior han ganado.
Esta nueva capacidad se ha logrado gracias a la propia arquitectura en la que se basa el modelo, ya que estrena la Nueva Plataforma Global de Toyota (denominada TNGA por su siglas en inglés). Gracias a ella, el Prius baja el centro de gravedad incrementando su estabilidad, reconfigura la distribución del habitáculo y logra tener una estructura más resistente a los impactos.
Renovado sistema híbrido
Fijándonos en su propulsor, Toyota asegura que ha revisado el conjunto exhaustivamente para mejorar la eficiencia, reducir el peso y afinar el rendimiento. Así, han logrado que el motor térmico proporcione un grado de eficiencia del 40%, un 1,5% más que el de la tercera generación. Otros componentes del sistema híbrido se han hecho más compactos y se han recolocado para optimizar el diseño, lo que también contribuye a rebajar el centro de gravedad del vehívulo. La nueva batería híbrida de niquel metal hidruro es más compacta, y su durabilidad y capacidad de carga también han mejorado considerablemente. La marca hace hincapié también en que el conjunto híbrido funciona de modo más suave y responde con mayor contundencia a la hora de acelerar y alcanzar velocidades altas.
De su interior destacan los cambios sufridos en el volante, de menor tamaño y más ergonómico, y el salpicadero. Los mandos y pantallas de este último se han recolocado a una posición más centrada, por lo que ya no da la sensación de que estén orientados exclusivamente al conductor. Asímismo, Toyota ha eliminado la doble guantera, confiriendo así a la zona del copiloto una imagen más limpia y próxima a la de un turismo convencional.
El nuevo Prius dispondrá como los Auris y Avensis 2015 del paquete de sistemas de seguridad Toyota Safety Sense. Inéditos en el equipamiento del modelo híbrido son ayudas a la conducción como el detector de peatones para el sistema de seguridad precolision o el control de crucero adaptativo. La dotación podrá completarse con calefacción en los asientos, techo solar o cargador inalámbrico para móviles.