Todos sabemos que conducir bajo los efectos del alcohol es ilegal, pero a pesar de ello, muchas personas lo hacen. Las cifras de la Dirección General de Tráfico (DGT) en materia de alcohol y drogas son alarmantes. A pesar de las sanciones económicas y penales, sigue habiendo conductores que intentan eludir los controles de alcoholemia con diversos trucos. ¿Funciona alguno de ellos? A continuación, exploramos los métodos más populares para engañar al alcoholímetro y la realidad detrás de ellos.
5El ‘vamos a esperar un ratito a que se me pase’
Esperar a que el alcohol se elimine naturalmente del cuerpo es la opción más sensata. El cuerpo necesita tiempo para metabolizar el alcohol, y generalmente se elimina a una tasa de aproximadamente 0,20 g/l por hora. Dependiendo de cuánto hayas bebido, esto puede significar esperar varias horas antes de que sea seguro conducir.
Para no dar positivo en un control de alcoholemia, es recomendable esperar un mínimo de cinco horas, pero esto varía según el metabolismo de cada persona y la cantidad de alcohol consumido.
