La Guardia Civil y la Policía Nacional han detenido a 30 personas que formaban parte de una organización dedicada a la obtención fraudulenta del carné de conducir por encargo. En concreto, los miembros de esta trama suplantaban a sus clientes en los exámenes del carné de conducir en la Dirección General de Tráfico, DGT, y luego les cobraban por el permiso un precio que rondaba entre los 1.800 y los 3.500 euros.
Hace solo unos días, la DGT también alertó de una estafa relacionada con el carné de conducir en relación con páginas de Internet fraudulentas que ofrecían la obtención del permiso sin necesidad de hacer ningún tipo de examen, simplemente pagando una cantidad de dinero.
Unas prácticas sobre las que advierten los agentes, ya que suponen un riesgo para la seguridad vial, al facilitar el permiso a personas sin los más mínimos conocimientos teóricos ni prácticos.
Carnés de conducir fraudulentos y tráfico de drogas
La investigación de la trama actual de obtención de carnés de conducir falsos desmantelada por la Guardia Civil y la Policía Nacional ha durado un año y medio y ha acabado con la detención de esa treintena de personas en diferentes puntos de Madrid, Mairena del Alcor (Sevilla) y Basauri (Bizkaia).
La primera pista de que había una red que se dedicaba a la obtención fraudulenta de carnés de conducir mediante la realización por encargo de los exámenes saltó en noviembre de 2021. Para la realización de estos exámenes, tanto teóricos como prácticos, los suplantadores acudían a las pruebas con documentos de identidad falsificados o también utilizaban los originales del propio cliente en algunos casos.
Además, la trama también está acusada de traficar con drogas y en la detención se han intervenido 300 kilos de marihuana, 776 mg de MDMA, 69 gramos de hachís, 54 gramos de heroína, 33 gramos de cocaína, 15.022 euros en efectivo, 4 armas, teléfonos móviles, documentos falsos y falsificados, documentos de identidad auténticos facilitados por los clientes de la organización y diversa documentación relacionada con la obtención de los permisos fraudulentos y relojes de alta gama y joyas diversas.
Los investigadores comprobaron que una parte de la organización desmantelada, afincada en Madrid, centraba sobre todo su actividad en la realización de los exámenes de conducir suplantando la personalidad del futuro conductor, y en menor medida en el tráfico de marihuana, heroína y cocaína. Había otra segunda parte de la trama, que actuaba sobre todo en Sevilla y su objetivo principal era el tráfico de marihuana.
Esta segunda organización también servía de intermediaria a los clientes que deseaban obtener un carné de conducir sin tener que realizar ningún examen, actuando como nexo de unión entre los miembros de la organización investigada y los clientes finales de la misma.
