En estas fechas son muchas las familias que regresan a casa después de pasar las vacaciones de Navidad con familia o amigos. Son días de desplazamientos largos al volante, que pueden verse complicados, y mucho, con las circunstancias climatológicas adversas propias de esta época del año. Lluvia, viento, nieve, hielo o niebla dificultan la conducción y ponen en riesgo nuestra seguridad.
La compañía de renting y gestión de flotas ALD Automotive ha elaborado una serie de consejos sobre cómo actuar si nos encontramos con alguno de estos fenómenos meteorológicos durante nuestro regreso a casa después de las vacaciones. Recuerdan, además, la importancia de tener siempre prudencia al volante y que, ante cualquier fenómeno de este tipo, es importante mantener la calma y extremar las precauciones para garantizar la seguridad vial. Estas son sus recomendaciones para afrontar el viaje de vuelta de las vacaciones de invierno.
4Con viento, sujetar con firmeza el volante
Cuando las rachas de viento son muy fuertes es importante reducir la velocidad y conducir en marchas más cortas para que el motor tenga más fuerza. El conductor tiene que sujetar firmemente el volante y evitar maniobras bruscas que puedan desestabilizar el vehículo, sobre todo al adelantar. Además, el viento puede provocar que caigan objetos sobre la calzada que pueden incrementar los riesgos.