La efectividad de la frenada depende de factores externos, y también internos al sistema de frenos, de ahí que un buen estado, revisión y mantenimiento sean fundamentales para garantizar su función, y evitar accidentes innecesarios.
El bloqueo de los frenos deriva en la perdida del control del coche en momentos cruciales durante la conducción, cuando los imprevistos aparecen.
Un líquido de frenos en mal estado puede provocar una prolongación de la frenada en ciertas circunstancias.
3Los vectores de actuación en la frenada
Uno de los principales elementos que tenemos que tener siempre en perfecto estado en nuestro coche es el sistema de frenos, ya que gracias a él podremos detener el coche, siempre que deseemos y anticiparnos a cualquier circunstancia que pueda ocasionarse en la calzada y evitarla con total seguridad.
Para ello, además de los discos y de las pastillas, también tenemos que tener siempre en un estado óptimo el líquido de frenos, ya que hará que se transfiera la fuerza de frenada desde el pedal hasta las ruedas, según el conductor lo requiera.
Este líquido es un fluido muy denso, fabricado a base de glicol o silicona. Después, se le añaden una serie de aditivos con los que se pueden mejorar su funcionamiento en el coche, así como su durabilidad.