780 radares fijos de control de velocidad, –92 de ellos de tramo-, 545 radares móviles que pueden ir embarcados en los vehículos de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, 12 helicópteros Pegasus, 39 drones, 245 cámaras de control del uso del cinturón y el móvil, 15 furgonetas camufladas, motos y coches sin rotular… ¡y también camiones camuflados!
La Dirección General de Tráfico (DGT) dispone de un gran número de medios técnicos para vigilar el cumplimiento de las normas de circulación, en especial los excesos de velocidad. Entre los vehículos que persiguen al infractor, hay muchos que no llevan ningún tipo de distintivo, por lo que pueden pasar completamente desapercibidos para los conductores.
La última incorporación al amplio catálogo de dispositivos de control del tráfico han sido 34 motocicletas camufladas. Estas controlan el cumplimiento de las normas, especialmente en las carreteras de mayor tránsito de motoristas. Pero la DGT dispone también de, al menos, un camión camuflado, que se sumó a la lista de vehículos hace un par de años.
2Motocicletas camufladas
Las motos camufladas han sido las últimas en llegar a la flota de vehículos de los que dispone la DGT para vigilar infracciones. Se trata de 34 unidades que comenzaron a circular en julio de este año durante los fines de semana por las zonas de mayor siniestralidad de motoristas. En 2020 ya se había realizado una prueba piloto con este tipo de vehículos en Galicia, con motos de gran cilindrada, en concreto una Honda ST 1300 Pan European y una BMW R 1150 RT.
Estas motocicletas no están equipadas con radares. Los agentes que viajan en ellas no van ataviados de forma visible para ser identificados por los conductores. Tampoco los vehículos llevan ningún distintivo exterior. La labor de estos agentes es especialmente de vigilancia, comunicando las posibles infracciones a otras patrullas cercanas aunque, en caso necesario, podrán parar a los posibles infractores.