El verano es la estación del año que invita a los viajes por carretera, con sus promesas de sol, playa y aventuras. Sin embargo, también es la época en la que más se producen asistencias en carretera. Agosto, en particular, se lleva la palma, concentrando cerca del 30% de todas las asistencias del año según datos de MAPFRE. ¿Pero cuáles son los motivos más habituales por los que los conductores se quedan tirados en medio de su travesía estival?
1Fallos del motor y otros elementos del vehículo
El calor extremo del verano puede ser un enemigo implacable para el motor de tu coche. Los fallos mecánicos son la causa principal de las asistencias en carretera durante esta temporada. Los sistemas de refrigeración se ven particularmente afectados, ya que deben trabajar más arduamente para evitar el sobrecalentamiento del motor. Además, los conductores suelen descuidar las revisiones periódicas, confiando en que su vehículo, que ha funcionado sin problemas durante el resto del año, seguirá haciéndolo en las condiciones más adversas del verano. Sin embargo, el calor puede exacerbar problemas latentes, llevando a averías inesperadas.
El calor también tiene un efecto adverso en las baterías de los automóviles. Aunque muchos asocian los problemas de batería con el invierno, el verano puede ser igual de problemático. Las altas temperaturas pueden acelerar la evaporación del líquido en las baterías, reduciendo su capacidad y vida útil. De hecho, MAPFRE informa que el 18% de las asistencias en carretera en verano están relacionadas con problemas de batería. Ya sea que se necesite una recarga o un recambio, es una de las razones más comunes por las que los conductores se encuentran varados.
