Comprar un coche de segunda mano puede ser una experiencia emocionante, pero también conlleva ciertos riesgos. Entre los más temidos están los llamados «vicios ocultos». Estos son defectos o problemas graves que no se perciben a simple vista durante la compra, pero que pueden afectar de manera significativa el rendimiento y la seguridad del vehículo.
Según la plataforma de compraventa AutoSpecial, se estima que un 30% de los vehículos usados vendidos entre particulares presentan algún tipo de vicio oculto. Vamos a analizar cuáles son los más comunes y cómo puedes protegerte al hacer tu compra.
5Daños ocultos tras accidentes
Los daños estructurales son quizás uno de los vicios ocultos más peligrosos. Un coche que ha sufrido un accidente grave puede tener reparaciones mal hechas que no son visibles a simple vista, pero que comprometen la seguridad del vehículo. Estos daños pueden afectar la alineación, la estabilidad y el rendimiento general del coche.
Un historial de accidentes y reparaciones es un indicador importante, pero en muchos casos, estos problemas pueden ser encubiertos o no declarados. Es recomendable realizar una inspección en profundidad y solicitar un informe detallado del historial del vehículo antes de comprarlo.
