El Grupo Volkswagen es líder mundial en investigación y desarrollo con una inversión de 11.500 millones de euros en 2014. Por ello no es de extrañar que la compañía alemana ofrezca ya la gama más amplia de soluciones de movilidad eléctrica de toda la industria automovilística, con nueve vehículos eléctricos o híbridos enchufables. Volkswagen está tan comprometida con sus objetivos medioambientales que emplea a 46.000 ingenieros en la movilidad del futuro, desarrollando tecnologías y vehículos que permitan cuidar al máximo el entorno sin sacrificar prestaciones.
En el caso concreto de la marca Volkswagen, la oferta está compuesta por tres modelos a cada cual más interesante y competitivo, una gama que seguirá creciendo a corto plazo con incorporaciones de calado como la del Passat GTE. No en vano, el objetivo de la marca alemana en el campo de la electromovilidad se ha fijado en liderar el mercado de los coches eléctricos en 2018. Y aunque de momento son tres los modelos que se mueven en parte o totalmente con electricidad los responsables de su desarrollo reconocen estar convencidos de que la electrificación del resto de la flota es una consecuencia inevitable.
Experiencia de conducción VW
Pero Volkswagen no está lanzando modelos eléctricos al mercado a cualquier precio. De hecho, la marca alemana ha conseguido superar muchos escollos para que este tipo de vehículos no fuese catalogado desde el principio como una gama de coches 'raros' cuya conducción requiriese un nuevo aprendizaje.
Por eso, la marca alemana ha conseguido dejar atrás las críticas de los usuarios a este tipo de vehículos, ofreciéndoles una experiencia de conducción idéntica a la de un modelo con propulsión convencional. Y es que para Volkswagen los coches híbridos enchufables y eléctricos tienen que ser ante todo Volkswagen, con todo lo que ello implica en términos de tecnología, seguridad, carácter deportivo y poder de atracción.
Aunque Volkswagen viene impulsando decididamente el desarrollo de la electromovilidad desde 2010, ha creído que ahora era el momento ideal para desplegar su potencial. Para la marca alemana ha llegado la hora de la movilidad eléctrica, la denominada e-mobility, inspirada por Think Blue, un desarrollo de Volkswagen como fabricante, de una actitud global para la sostenibilidad ecológica.
Una gama con tres modelos… Por ahora
Las armas de la firma alemana se centran por el momento en dos modelos eléctricos puros (e-up! y e-Golf) y en un híbrido enchufable (Golf GTE). Y los precios de la gama comienzan en los 22.000 euros del e-up, una vez descontadas los 5.500 euros de ayuda del Gobierno y suben hasta los 35.630 euros de la versión GTE del Golf a la que en este caso se le han descontado ya los 3.700 euros de subvención asociada a un híbrido enchufable.
Los vehículos cien por cien eléctricos son ideales para la ciudad y las grandes aglomeraciones urbanas. En Volkswagen creen que el potencial de ventas en el ámbito privado es como segundo coche y, en el industrial, en flotas de empresas y vehículos de reparto.
Así, el e-up! lo conciben para ser un bólido urbano y dar respuesta a la tendencia al alza de la movilidad en ciudad y entre el trabajo y la vivienda. Con el e-Golf quieren despertar el interés por la electromovilidad de una amplia clientela. El e-Golf es claramente más espacioso que el e-up!, con lo que es perfecto para personas que necesitan espacio pero no suelen hacer trayectos largos. Para la mayoría de los habitantes de áreas metropolitanas, la autonomía del e-Golf, que es de unos 190 kilómetros, es más que suficiente.
Tanto el e-up! como el e-Golf tienen características de conducción ideales y en ambos casos el par motor es máximo al inicio del arranque. El factor sostenibilidad también ha sido contemplado. Y es que conduciendo de una forma anticipativa y previsora, el conductor puede recuperar energía ya que el motor eléctrico transfiere la energía de frenada a la batería de alta tensión.
Golf GTE: nueva sensación de conduccion deportiva
En el caso delGolf GTE, se combina el motor eléctrico y el de gasolina, generando conjuntamente una nueva sensación de conducción deportiva pero mejorando notablemente los consumos. Y la posibilidad de cargar la batería en un enchufe doméstico permite disfrutar de un coche eléctrico a diario. A la hora de viajar el Golf GTE destaca por una autonomía de nada menos que 940 kilómetros.
Con el paso de gigante dado por Volkswagen, ahora sí que se puede decir que la era de la movilidad eléctrica entra en una etapa decisiva. El futuro echa chispas.