Cada dos por tres, alguna marca de automóviles bate un récord en el legendario Nürburgring Nordschleife, conocido cariñosamente como el Infierno Verde. Sin embargo, el último récord que ha llegado a nuestros oídos es un poco más peculiar. De hecho, se trata de un récord a dos ruedas, y no precisamente en una moto, sino en coche. El especialista chino Han Yue ha logrado esta impresionante hazaña al volante de un MINI.
Con una duración de unos 45 minutos, esta vuelta en el circuito alemán no es la más rápida de la historia, pero sí una de las más curiosas y desafiantes. El piloto ha completado el trazado al completo, enfrentándose a los múltiples cambios de rasante y curvas que hacen de este circuito uno de los más difíciles y peligrosos del mundo. El mítico Karussell, con su peralte inclinado, es solo uno de los obstáculos que Han tuvo que sortear en esta extraordinaria prueba de habilidad y control.
¿Cómo fue que hizo el circuito de Nürburgring en dos ruedas?
Para ser capaz de realizar el recorrido entero a dos ruedas, el MINI conducido por Han Yue ha sufrido una serie de modificaciones. En primer lugar, se ha incorporado una jaula antivuelco para garantizar la seguridad del piloto en caso de pérdida de equilibrio. Además, el coche cuenta con un asiento de competición con arnés, proporcionando el soporte necesario para mantener a Han en su lugar durante la intensa y prolongada maniobra.
El aspecto más crucial de la preparación del coche ha sido el juego de llantas especiales con neumáticos de goma sólida. Estos neumáticos han sido adaptados a medida para soportar el estrés extremo de conducir a dos ruedas durante 45 minutos, evitando los riesgos de un reventón que podría haber resultado catastrófico. La combinación de estas modificaciones ha permitido a Han Yue completar su increíble hazaña de manera segura y controlada.
La importancia de la seguridad en la conducción extrema
La hazaña de Han Yue pone de relieve la importancia de la seguridad en las acrobacias automovilísticas. Las modificaciones en el MINI Cooper, especialmente la jaula antivuelco y el asiento de competición con arnés, son esenciales para proteger al piloto en situaciones de riesgo extremo. Además, el uso de neumáticos de goma sólida adaptados a medida demuestra cómo la innovación y la ingeniería pueden trabajar juntas para superar desafíos aparentemente imposibles.
La vuelta a Nürburgring Nordschleife a dos ruedas ha capturado la imaginación de los aficionados al motor en todo el mundo. Esta hazaña no solo demuestra la increíble habilidad y valentía del piloto, sino también el potencial de los automóviles y la ingeniería moderna para lograr lo extraordinario. Para muchos, este loco corredor se ha convertido en una fuente de inspiración, mostrando que, con dedicación y preparación, se pueden alcanzar nuevos horizontes en el mundo de la conducción extrema.