Durante julio de este año se han registrado 131 decesos en carretera, lo que supone un incremento del 12% respecto a 2019, último año de normalidad previo a la pandemia de COVID. Respecto a este aumento, Pere Navarro declaró recientemente que las “sucesivas olas de calor consecutivas están detrás del incremento de la siniestralidad en carretera”. Aunque la verdadera obsesión de Pere Navarro sean los delitos de alcoholemia y velocidad al volante.
2Datos escalofriantes
De acuerdo con datos de la DGT en 2019 la velocidad fue responsable del 23% de los accidentes en carretera. Unas cifras demasiado elevadas y que la DGT quiere bajar como sea.
De hecho, la nueva Ley de Tráfico incluía la eliminación del margen de 20 kilómetros/hora para adelantar. Una medida que el propio Pere Navarro justificaba como necesaria para el correcto funcionamiento de los radares de tramo y para el incremento de los mismos. La principal obsesión de Pere Navarro.
En paralelo, la DGT llevó a cabo una campaña de control extraordinaria de velocidad con más de 2.200 radares distribuidos por todo el territorio nacional. Se llevaron a cabo 747.303 controles de velocidad, de los cuales 42.200 conductores fueron sancionados por exceder el límite de velocidad.
De ellos, cinco incurrieron en un delito contra la seguridad vial por exceder el límite de velocidad en más de 80 kilómetros/hora. Cinco conductores que pueden haber incurrido en un presunto delito del que tendrán que dar cuenta ante la justicia. Pueden enfrentarse a una multa de entre 100 y 600 euros más la retirada de entre 2 y 6 puntos del carnet de conducir.