Nuestro objetivo de 25.000 kilómetros con el nuevo Ford Focus EcoBoost está llegando a su fin. Actualmente nuestro cuentakilómetros nos marca 18.200, lo que significa que nos quedan menos de 7.000 km para acabar esta aventura. No obstante, y hasta que ese momento llegue, os seguiré contando cómo va evolucionado el coche. Para saber cómo va su mecánica y si su desgaste está siendo el correcto después de nuestras andanzas tendremos que esperar a la revisión que haremos a los 20.000 km. Sin embargo, ya os podemos adelantar que un primer vistazo de mantenimiento rutinario (el que implica mirar los niveles de líquido, desgaste de neumáticos y los filtros del aire) todo parece estar en perfectas condiciones de uso.
Viajar cómodamente
Pero dejémonos de rollos y empecemos a hablar de lo que a muchos os importa, la vida interior en el Focus. Siendo sincero el Focus me ha llamado mucho la atención en este aspecto. Soy usuario habitual de un Focus de primera generación y si hay algo de lo que pecaba este modelo en sus orígenes es de ser un coche práctico pero no cómodo. Sus plazas traseras contaban con el espacio justo para tres ocupantes y si queríamos colocar las piernas de manera cómoda en un trayecto largo, el espacio disponible resultaba muy limitado. Sin embargo en el nuevo modelo estas carencias han desaparecido completamente. A su gran acabado interior se le suma un espacio realmente amplio.
En mis últimos dos viajes realizados por tierras mañas y asturianas he tenido la suerte de contar con un grupo de amigos para poder probar todo esto que os acabo de contar y la verdad que sus impresiones junto a las mías han sido francamente buenas. Ninguno de ellos se ha encontrado incómodo viajando durante horas en las plazas traseras. Es más, sus piernas apenas han sufrido fatiga por la falta de espacio. La comodidad de sus asientos y su ergonomía les ayudó a salir de los viajes sin dolores y con una alegría y optimismo que les invitaba a cantar. Esto último no hubiese sido posible sin la ayuda de su gran equipo de sonido firmado por Sony. Pero no solo se viaja cómodo en la parte trasera del coche, en las plazas delanteras también gozas de total libertad a la hora de afrontar viajes. Además si eres una persona que le gusta tener todo a mano y contar con muchos objetos en el día a día en un vehículo, el Focus es tu coche ya que a una gran guantera se le une una variedad de espacios portaobjetos repartidos por todo el interior del vehículo (principalmente en puertas, asientos y reposabrazos central) que te permitirán tener todo a mano en cualquier momento.
Consumos contenidos
El Focus no solo me ha sorprendido a mi sino que lo sigue haciendo con todos los probadores que lo conducen por su capacidad para recorrer cientos de kilómetros sin que el cansancio haga mella en el conductor. Esto sin duda se debe a cualidades tan buenas como su buen aprovechamiento del espacio interior, a su facilidad de conducción, su suavidad, el silencio de marcha, el acertado diseño de sus asientos y la seguridad que transmite el conjunto con su excelente aplomo.
También está gustando mucho su motor, el 1.0 EcoBoost de 125 caballos que aúna elasticidad con bajos consumos y generosas autonomías para un vehículo que, debemos recordar a los más despistados, está propulsado por gasolina y sólo tiene 3 cilindros. De hecho, siendo fiel a la ley en autovía y autopista, el Focus puede recorrer con un solo depósito y sin parar a repostar un total de entre 780-800 kilómetros, gracias en parte a un consumo que poco a poco ha ido bajando con su utilización de los 6,4 a los 6,2 litros cada 100 kilómetros. Su depósito de 53 litros también ha ayudado a conseguir esta tarea.
Pero además de pasar poco por la gasolinera, el Focus con el que no paramos de hacer kilómetros se mueve bien en cualquier situación. Si nos salimos de las vías rápidas y nos da por meternos de lleno en un puerto de montaña repleto de curvas comprobaremos en primer lugar el excelente comportamiento del coche y una estabilidad que no está reñida con una elevada comodidad para los ocupantes. Y en segundo lugar también veremos que este moderno motor de 125 caballos ofrece una elasticidad destacable y muy buena respuesta en cualquier situación. Además el cambio es en mi opinión, uno de los mejores del segmento por precisión, agrado y rapidez. Sí que hemos notado que en la arrancada desde parado y algunos cambios a baja velocidad hay que subir el motor de vueltas algo más de lo normal o tirar de embrague para que no se cale.
El Focus también tiene pegas, aunque se podría hablar de pegas menores que no empañan el buen sabor de boca que le queda a todo el que lo conduce. Nos referimos a su sistema de navegación al que le seguimos poniendo como falta algo de rapidez.
Esto ha sido todo en el artículo de hoy. Os recomiendo que no dejéis de estar atentos al Twitter y al Facebook de Motor16 para saber dónde estamos cada día y para que podáis decirnos qué ciudades, pueblos, villas o lo que queráis podemos visitar con nuestro protagonista.
