Los urbanos no viven su mejor momento. En los últimos años, varias de las alternativas de este segmento han desaparecido, como el Citroën C1 y el Peugeot 108. Sin embargo, hay fabricantes que siguen apostando por este formato. Concretamente Toyota con el nuevo Toyota Aygo X Cross.
Y es que los utilitarios siguen siendo imbatibles en ciudad, por tamaño, simplicidad y economía de uso. De acuerdo, quizá la fórmula por la que apostaban se estaba quedando anticuada y el gran público echaba de menos un estilo más crossover. Al fin y al cabo, el enfoque SUV funciona en todas las categorías. Es por ello que Toyota ha transformado el Aygo en un mini todocamino. El resultado es el Toyota Aygo X Cross.
De esta forma, el modelo más pequeño de la marca japonesa sigue los pasos de sus hermanos mayores. Sucedió con el Toyota Yaris y la variante Toyota Yaris Cross hace unos meses. También con el Toyota Corolla y la alternativa Toyota Corolla Cross que aterrizará en las calles este mismo año.
El Toyota Aygo X Cross se vuelve crossover
Eso sí, en el Toyota Aygo X Cross las capacidades todoterreno brillan por su ausencia. Ni las cotas de su carrocería son propicias para salir del asfalto, ni cuenta con un sistema de tracción total como el del Yaris Cross. Simplemente adopta rasgos estéticos del mundo SUV. Protecciones inferiores de la carrocería, pasos de ruedas de plástico, grandes ruedas y cierta altura libre al suelo (14,6 cm).
También crece por fuera. Su carrocería de cinco puertas llega hasta los 3,70 metros de largo, 1,74 metros de ancho y 1,51 metros de alto. Es más grande que el Toyota Yaris de primera generación y prácticamente igual que la segunda entrega del Yaris; el actual mide 3,94 metros de largo. Ese aumento de tamaño se debe a la plataforma que utiliza, una variación de la TNGA-B sobre la que se asientan el Toyota Yaris y el Toyota Yaris Cross.
Más amplio por dentro
Gracias a ello, su interior es algo más espacioso que el del anterior Toyota Aygo. Obviamente, no está al nivel del Yaris, de hecho, solo tiene cuatro asientos, pero no hay que olvidar que estamos ante un coche urbano pensado para llevar a cabo trayectos cortos. Las plazas delanteras son más que correctas, incluso para personas de 1,90 m de altura.
Las traseras están más indicadas para niños, pero pueden servir para acomodar a dos adultos más en pequeños recorridos. Lo complicado es entrar a la zona posterior del habitáculo. El ángulo de apertura de las puertas es realmente escaso y las personas de gran envergadura tienen hacer algo de contorsionismo para acceder a estas plazas. Una vez dentro, sorprende que las ventanas posteriores sean de tipo compás, algo que no veíamos desde hace tiempo.
El maletero del Toyota Aygo X Cross crece
En cuanto al maletero, tiene una capacidad de 231 litros. Por ponerlo en contexto y seguir con la comparación con el Yaris, el de su hermano mayor tiene 270 litros. Hay poca diferencia, por tanto, y es suficiente volumen para llevar la compra semanal, las mochilas del colegio o una bolsa de deporte para el gimnasio. En caso de necesitar más espacio, los respaldos de los asientos posteriores para ampliar el maletero hasta los 829 litros.
Por lo demás, el interior del Toyota Aygo X Cross ha dado un paso adelante en materia de equipamiento. Destaca la pantalla táctil central, de 7 o 9 pulgadas en función del acabado. El sistema de infoentretenimiento que utiliza es rápido y sencillo, además, puede tener Android Auto y Apple CarPlay sin cables, algo que no ofrecen coches de segmentos superiores.
La instrumentación del Toyota Aygo X Cross combina un indicador analógico para la velocidad con una pantalla digital. Este panel es básico y no se puede personalizar, pero ofrece suficiente información relativa a la conducción, como el consumo o el indicador de señales de tráfico.
Equipamiento del segmento superior
El Toyota Aygo X Cross también puede tener carga inalámbrica para smartphones y cuenta con climatizador digital monozona, así como un sistema de audio JBL en las versiones más equipadas. Sin embargo, los elevalunas no son de un toque, hay que mantenerlos pulsados para subir o bajar las ventanillas delanteras.
En lo que respecta a la calidad, es simplemente correcta. Todas las superficies del interior del Toyota Aygo X Cross son de plástico blando. Los ajustes son sólidos, pero el salpicadero, los paneles de las puertas o la consola central no transmiten la misma sensación de calidad que en el Yaris. Tampoco la superficie de chapa que queda a la vista en el interior de las cuatro puertas.
Al volante es más coche
Pero la mayor evolución que ha experimentado el Toyota Aygo X Cross es en el plano dinámico. La plataforma de sus hermanos mayores tiene la culpa. Es más ágil que antes y se siente más aplomado, tanto en ciudad, como en carretera. También se debe a las enormes ruedas que monta, con llantas de aleación de 17” en las versiones básicas y de 18” en las más equipadas.
La dirección sigue teniendo un nivel elevado de asistencia, lo que unido a un diámetro de giro de 9,4 metros hace que se desenvuelva de maravilla en ciudad. Aparcar también es pan comido y la cámara de marcha atrás contribuye a que cualquier maniobra sea todavía más fácil. Teniendo en cuenta que ese es uno de los objetivos de cualquier urbano, el Toyota Aygo X Cross sigue cumpliendo a la perfección.
Más calidad de rodadura
En carretera es más efectivo que el modelo anterior. Está mejor insonorizado y su comportamiento se acerca más al de un utilitario, con una suspensión que filtra bien los baches y contiene los balanceos de la carrocería. La limitación viene dada por la potencia de su mecánica. Sirve para llevar a cabo trayectos relativamente cortos, siempre y cuando se conduzca a ritmo tranquilo.
Toyota ha vuelto a apostar por el motor de gasolina de tres cilindros y 1.0 litros atmosférico de 72 CV del Aygo anterior. Esta mecánica ha recibido algunos cambios para mejorar su rendimiento y ganar eficiencia. Puede asociarse a un cambio manual de cinco relaciones o a uno automático de tipo CVT. El más recomendable es el manual porque se saca más partido del bloque atmosférico, que requiere llevarlo a un régimen alto de vueltas para entregar todo su potencial.
Poca potencia y poco peso
En determinadas situaciones, de hecho, es obligatorio llevarlo alegre, como en una incorporación a una autovía. Incluso hay que llegar a bajar una marcha para mantener los 120 km/h en tramos de autovía con mucha pendiente. Los 72 CV no pueden dar más de sí, pese a que el coche es bastante ligero, con un peso de 1.015 kg en la variante de acceso a la gama.
El cambio automático de variador continuo hace que el Toyota Aygo X Cross sea más cómodo de conducir, sobre todo en ciudad, pero es ruidoso. Además, como es habitual con estas transmisiones, el sonido que produce no va acompasado con la ganancia de velocidad.
El Toyota Aygo X Cross es un mechero
En la toma de contacto también obtuvimos un consumo más contenido con el Toyota Aygo X Cross manual. En recorrido mixto conseguimos una media de 4,4 l/100 km sin conducir de manera eficiente, mientras que, con el automático, el gasto combinado subió a 5,5 l/100 km. De cualquier forma, el Aygo es muy frugal sin depender de un turbo o de cualquier tipo de electrificación.
Por otro lado, que no esté electrificado de ninguna forma supone que el Toyota Aygo X Cross no tenga la etiqueta ECO o CERO, como sucede con el resto de la gama de Toyota. Está claro que la sencillez implica facilidad de uso y menos coste, tanto de compra, como de utilización. Pero en un coche urbano también supone perder terreno frente a rivales 100% eléctricos libres de restricciones, como el Renault Twingo Electric o el Dacia Spring.
¿Cuánto cuesta el Toyota Aygo X Cross?
Por último, queda hablar del precio. El Toyota Aygo X Cross ya está disponible desde 13.600 euros con el acabado básico, denominado Play. Por encima está a la venta el Toyota Aygo X Cross Trendy Edition, bastante más equipado y con un precio de partida de 14.600 euros.
La opción más completa es el Toyota Aygo X Cross Limited Edition, que cuesta 17.000 euros. Incluye llantas de 18”, asientos delanteros calefactables, faros Full LED, navegador, tapicería de cuero parcial, audio JBL y una combinación de colores exclusiva, entre otras cosas, así como la posibilidad contar con techo deslizante de lona eléctrico.
