El Quadrifoglio (trebol de cuatro hojas en italiano) se ha convertido en unos de los símbolos de Alfa Romeo. Hace un siglo que un piloto decidió ponerlo en su bólido, en busca de la buena suerte que le era esquiva. Tras dar buen resultado, la firma lo adoptó como un talismán… aunque tuvo un final trágico.
En la actualidad sirve para identificar a las versiones más deportivas del Giulia y el Stelvio, que presentan unos conceptos muy diferenciados entre sí: un sedán clásico y un SUV de lujo. Eso sí, sobre la carretera, el resultado es igual de excitante para quien aprecie las sensaciones de conducción.
En ambos casos esconden bajo el capó un bloque de gasolina 2.9 V6 biturbo. En los modelos 2023 que hemos tenido la oportunidad de probar, la potencia ha aumentado en 10 CV respecto a los MY 2022, hasta alcanzar los 520 CV. Se combina con una caja de cambios automática con convertidor de par, que envía la fuerza a las ruedas traseras en el caso del Giulia y a las cuatro en el Stelvio. En ambos casos, el eje trasero dispone de un diferencial mecánico de deslizamiento limitado.
En el habitáculo reciben los mismos cambios que en las respectivas gamas 2023, con un extra: el cuadro de mandos digital de 12,3 pulgadas cuenta con un diseño específico cuando se acciona el modo Race, que da prioridad al cuentarrevoluciones. Otro detalle diferenciador está en las molduras del salpicadero en imitación de fibra de carbono, no sólo en apariencia, sino también en textura.
Alfa Romeo Quadrifoglio, también en una serie (muy) limitada
Capítulo aparte merece la versión especial conmemorativa de los 100 años del Quadrifoglio, que se caracteriza por los detalles dorados en las costuras del interior y el logotipo, entre otros detalles. Eso sí, sólo se van a fabricar 100 unidades, de las cuales sólo dos son para España… y ya están adjudicadas.
Lo que no ha cambiado en absoluto es la cantidad y calidad de sensaciones que son capaces de ofrecer estos modelos, aspecto en el que ambos son la referencia de su segmento. En el caso del Giulia, hablamos de un modelo que tiene como principal competidor a un mito como el BMW M3, al que ahora aventaja en 10 CV y, lo que es más importante, en peso, ya que es 70 kilogramos más ligero.
Cifras aparte, el Giulia Quadrifoglio transmite una ligereza fuera de lo común, digna de un modelo de menor envergadura. Además, gracias al chasis adaptativo con cuatro modos de conducción, se puede disfrutar de una plácida berlina o de una configuración prácticamente para circuito, cuando se activa el modo Race.
Cabe destacar que al seleccionar este modo la suspensión se ajusta a un modo extremadamente rígido, se amplifica el sonido del escape y se desconectan las ayudas a la conducción (control de estabilidad y de tracción). Por ello no es una opción aconsejable para carretera abierta, especialmente en el caso del Giulia Quadrifoglio que tiene propulsión exclusivamente a las ruedas traseras.
Lo anterior es extrapolable al Stelvio, un SUV capaz de enfrentarse sin complejos a un BMW X3 M con paquete Competition; no en vano le supera en potencia y en velocidad máxima, establecida en 285 km/h. La aceleración de 0 a 100 km/h es idéntica que en el modelo alemán, 3,8 segundos, lo que representa 0,1 segundos menos que en el más liviano Giulia Quadrifoglio.
Por último, otra buena noticia es que Alfa Romeo ha realizado un reajuste a la baja de los Quadrifoglio. De esta manera, el Giulia tiene una tarifa de partida de 105.800 euros (casi 12.000 euros por debajo del BMW M3), mientras el Stelvio está disponible desde 115.900 euros, frente a los más de 129.000 euros de un X3 M Competition.
