El Volkswagen Tiguan lleva entre nosotros desde 2007, y es uno de esos modelos que ha mantenido con bastante fidelidad su esencia. Si bien es cierto que las versiones 4×4 (4Motion) han ido cediendo protagonismo a las de tracción delantera, sus dimensiones siguen siendo lo bastante compactas para hacer de él un vehículo manejable en todo tipo de entornos a la vez que permiten a una familia viajar con un razonable equipaje y un buen nivel de confort.
Ahora hemos tenido la ocasión de probar por primera vez la tercera generación del SUV alemán, y lo hemos hecho poniéndonos al volante de dos unidades: un Tiguan 2.0 TDI 4Motion R-Line de 193 CV y un 1.5 eTSI R-Line de 150 CV.
Así es el nuevo Volkswagen Tiguan
De entrada, la gama del nuevo Tiguan se articula en torno a una única carrocería de 4,55 metros de longitud. Existe una variante de batalla larga y 4,73 metros de longitud, pero no va a comercializarse en Europa, al menos por el momento.
La gama mecánica se abre con dos versiones del eficiente motor 1.5 TSI (EA211 Evo2), un tetracilíndrico alimentado por inyección directa de gasolina a alta presión (350 bares), sobrealimentado por turbocompresor de geometría variable y dotado de refinamientos como la desactivación selectiva de dos cilindros, camisas de cilindros de baja fricción mediante tratamiento de plasma y, por supuesto, el sistema de hibridación ligera con un motor eléctrico alimentado por una batería de 48 voltios.
Disponible con 130 o 150 CV, hemos probado esta última versión y tengo que reconocer que me ha encantado su respuesta inmediata a las órdenes del acelerador, algo achacable en buena medida a la intervención del motor eléctrico en los momentos en los que el 1.5 turbo es menos eficiente: con baja carga de acelerador o a regímenes especialmente bajos.
Para quienes busquen mayores prestaciones, Volkswagen ofrece el Tiguan con motor 2.0 TSI de 204 CV (versión que no estará disponible hasta finales de año), así como con dos versiones híbridas enchufables, que estrenan un avanzado sistema de propulsión compuesto por el motor 1.5 TSI (en versiones de 150 CV y 177 CV), un motor eléctrico de 115 CV y una batería de nada menos que 19,7 kWh netos (25,7 kWh brutos).
Así, los Tiguan eHybrid desarrollan 204 CV (con el motor TSI de 150 CV) y nada menos que 272 CV (en el caso del 1.5 TSI de 177 CV), con lo que sus prestaciones son notables en términos absolutos (0-100 km/h en 7,0 segundos en el caso de la variante más potente) pero no tanto en relación a esos 272 CV declarados, si bien lo más llamativo es su autonomía eléctrica, que puede alcanzar los 125 km en ciclo combinado WLTP.
Otro aspecto interesante de este híbrido enchufable (que por supuesto cuenta con la etiqueta Cero) es que puede cargarse tanto en la red, con corriente alterna a 220 voltios y una potencia de hasta 11 kW, como en cargadores rápidos de corriente continua, a 50 kW.
Sigue habiendo versiones 4×4 del Volkswagen Tiguan
Afortunadamente, quienes entiendan que un SUV debe tener buenas capacidades para salir del asfalto pueden recurrir a las versiones 4Motion, que, como de costumbre, envían par permanentemente a las ruedas delanteras y al árbol de transmisión que permite acoplar el tren trasero, si bien a la entrada de este eje se instala el habitual embrague Haldex que desacopla casi totalmente la conexión a las ruedas traseras en la gran mayoría de las circunstancias para reducir consumos, emisiones y desgaste mecánico.
Hay diferentes modos de conducción, las suspensiones ofrecen un recorrido razonable y las cotas no son especialmente malas, sobre todo teniendo en cuenta que la prioridad en el diseño del vehículo ha sido lograr el mejor coeficiente de penetración aerodinámica posible, lo que supone que el Cx pase del 0,33 que registraba la anterior generación a sólo 0,28.
Y aunque no hemos podido conducir el nuevo Tiguan en situaciones realmente desafiantes, sí hemos recorrido algunas pistas de tierra y piedras, y la impresión es buena… con la salvedad de los neumáticos, ya que la únicas variante 4Motion de la gama va asociada al acabado R-Line, que supone montar neumáticos 255/45-19 o 255/40-20, ruedas asfalto de altas prestaciones con dibujos, flancos y carcasas poco adecuados para pisar otra cosa que no sea asfalto en impecable estado.
Sí hemos podido hacer suficientes kilómetros en carretera, y de las dos versiones probadas, nos quedamos con el Volkswagen Tiguan 1.5 eTSI R-Line de 150 CV, en el que hemos encontrado un comportamiento más ágil y una respuesta mucho más inmediata al acelerador.
La gama 2024 del nuevo Volkswagen Tiguan
Volkswagen Tiguan 1.5 eTSI 130 CV: 37.210 euros*
Volkswagen Tiguan Life 1.5 eTSI 130 CV: 40.185 euros
Volkswagen Tiguan Más 1.5 eTSI 130 CV: 41.175 euros
Volkswagen Tiguan Life 1.5 eTSI 150 CV: 41.270 euros
Volkswagen Tiguan Más 1.5 eTSI 150 CV: 42.270 euros
Volkswagen Tiguan R-Line 1.5 eTSI 150 CV: 47.590 euros
Volkswagen Tiguan 2.0 TDI 150 CV: 40.430 euros
Volkswagen Tiguan Life 2.0 TDI 150 CV: 43.405 euros
Volkswagen Tiguan Más 2.0 TDI 150 CV: 44.460 euros
Volkswagen Tiguan R-Line 2.0 TDI 150 CV: 49.730 euros
Volkswagen Tiguan R-Line 2.0 TDI 4Motion 193 CV: 54.225 euros
Volkswagen Tiguan Life 1.5 TSI eHybrid 204 CV: 48.970 euros**
Volkswagen Tiguan Más 1.5 TSI eHybrid 204 CV: 50.420 euros
Volkswagen Tiguan R-Line 1.5 TSI eHybrid 204 CV: 55.585 euros
Volkswagen Tiguan R-Line 1.5 TSI eHybrid 272 CV: 58.715 euros
* Disponible, con campaña y financiación, desde 33.700 euros.
** Disponible, con campaña y financiación, desde 38.200 euros.