La mítica frase del carismático Buzz Lightyear le sienta como un guante a este BMW 520d, una berlina con la que da gusto viajar hasta el último rincón del mundo, siempre con un alto agrado, la última tecnología y el consumo que solo un diésel es capaz de conseguir.
Con la octava generación de su legendario Serie 5, la firma de Múnich lo ha bordado a todos los niveles. Y el mecánico es uno de ellos, porque esta berlina (en breve llegará la carrocería Touring) aterriza con opciones gasolina y diésel (con tecnología híbrida ligera), híbrida enchufable y eléctrica pura, ofreciendo un abanico de posibilidades que se adaptan a cada necesidad.
El motor de este BMW 520d es una leyenda en la firma
Posiblemente los híbridos enchufables, con más de 100 km de autonomía en modo eléctrico, sean perfectos para quienes necesiten una etiqueta ‘0 emisiones’, al igual que un i5, que ofrece hasta hasta 579 km de autonomía media. Pero si eres de viajar, igual no es una idea descabellada dar una oportunidad a una tecnología idolatrada hace un tiempo por fabricantes y clientes, los mismos que ahora le han dado la espalda, como si de un criminal se tratase.
Hablamos del diésel. Y más concretamente de este ‘sencillo’ BMW 520d, que esconde bajo su capó ese mítico motor de dos litros y cuatro cilindros en línea que hemos visto en infinidad de modelos desde su aparición con el 320d de la generación E46 allá por 1998. Cuando los diésel eran los verdaderos reyes en Europa.
Esta versión diésel consigue la etiqueta ECO de la DGT
En este BMW 520d ese motor ahora adquiere la última tecnología, filtros de partículas, inyección de AdBlue… todo lo necesario para que esas temidas emisiones de NOx se reduzcan a la mínima expresión. Reducción que comienza con un consumo medio homologado de solo 5,1 l/100 km. Una cifra digna de alabanza en una berlina con más de cinco metros y con 1.850 kilos de peso, que además suma un sistema híbrido ligero de 48 voltios para conseguir la etiqueta ECO.
Y una cifra que ha sido calcada al gasto real que hemos medido a este BMW 520d en uso real. Porque delante de tus ojos tienes un auténtico ‘mechero’ de los de antes. De los de llenar el depósito y ver una cifra de autonomía que los eléctricos jamás llegarán a tener. Ni con baterías de estado sólido ni gaitas.
Sensacionales cifras para este eficiente BMW 520d
| Motor | 2.0 Diésel |
| Disposición | Delantero longitudinal |
| Nº de cilindros/válvulas | 4, en línea / 16 |
| Cilindrada (c.c.) | 1.995 |
| Alimentación | Iny. dir. por raíl común, turbo de geometría variable e intercooler |
| Potencia máxima/rpm | 197 CV / 4.000 |
| Par máximo/rpm | 40,8 mkg (400 Nm) / 1.500-2.750 |
| TRANSMISIÓN | |
| Tracción | Trasera |
| Caja de cambios | Automática de 8 velocidades |
| DIRECCIÓN Y FRENOS | |
| Dirección | Cremallera, electromecánica |
| Vueltas de volante (entre topes) | 2,2 |
| Diámetro de giro (m) | 12,3 |
| Frenos. Sistema (Delantero/Trasero) | Discos ventilados / Discos ventilados |
| SUSPENSIÓN | |
| Delantera: Independiente. | |
| Trasera: Independiente. | |
| RUEDAS | |
| Neumáticos | 225/55 R18 |
| Marca | Pirelli |
| Dimensiones y capacidades | |
| Peso en orden de marcha (kg) | 1.850 |
| Largo/Ancho/Alto (mm) | 5.060 / 1.900 / 1.515 |
| Capacidad del maletero (l) | 520 |
| Capacidad del depósito (l) | 60 |
| Velocidad máxima | 233 km/h |
| Aceleración (en segundos) | |
| 400 m salida parada | 15,6 |
| 1.000 m salida parada | 28,2 |
| De 0 a 50 km/h | 2,6 |
| De 0 a 100 km/h (oficial) | 7,4 (7,3) |
| Recorriendo (metros) | 118 |
| Recuperación (en segundos) | |
| 400 m desde 40 km/h en D | 13,8 |
| 1.000 m desde 40 km/h en D | 26,7 |
| De 80 a 120 km/h en D | 5,4 |
| Recorriendo (metros) | 152 |
| Error de velocímetro a 100 km/h | + 2% |
| Frenadas (en metros) | |
| Desde 60 / 100 / 120 km/h | 13,5/38,6/52,1 |
| sonoridad (en decibelios) | |
| A 60 km/h / A 100 km/h / A 120 km/h | 57,2/59,4/63,5 |
| Consumos | l/100 km |
| Ciudad A 22,1 km/h de promedio | 6,1 |
| Carretera A 90 km/h de crucero | 3,9 |
| Autopista A 120 km/h de crucero | 5,0 |
| Consumo medio (Porcentaje de uso 30% urbano; 50% autovía; 20% carretera) | 5,1 |
| Autonomía media | |
| Kilómetros recorridos | 1.176 |
| Consumos oficiales | |
| Ciclo mixto | 5,1 |
Es en carretera donde este BMW 520d se siente como pez en el agua. Los largos viajes se convierten en un paseo gracias a su elevado confort de marcha. Y eso que nuestro protagonista venía equipado con el paquete deportivo M y con llantas de 20 pulgadas, que no crean un vehículo incómodo en ningún momento.
A 120 km/h su corazón diésel gira a solo 1.830 rpm gracias a combinarse con el cambio automático de 8 velocidades, un cambio que le sienta como anillo al dedo y que permite extraer lo mejor de este motor diésel, en el cual no han escatimado en gastos a la hora de hablar de insonorización, pues sin ser el bloque más suave y silencioso del mercado, pasa totalmente desapercibido. Sólo muestra su áspero sonido si pisamos el acelerador con contundencia.
Madrid – Barcelona – Madrid con un solo depósito
A ritmo legal por vías rápidas firma un gasto de solo 5,0 l/100 km, por lo que podrías viajar de Madrid a Barcelona, y deshacer el camino con un solo depósito. Que además es de apenas 60 litros.
Además de ofrecer un confort de marcha extraordinario, su naturaleza de vehículo de propulsión posterior (hay un 520d xDrive por 2.550 euros más) también le permite ofrecer una emocionante dinámica, ayudado por una precisa y rápida dirección, además de por una extraordinaria puesta a punto de un chasis que deriva del buque insignia de la marca. Gracias a ello disimula su peso y sus dimensiones, cosa que no ocurre en la urbe, porque el nuevo Serie 5 deja claro a su conductor que es un coche grande.
El BMW 520d tiene un precio de partida de 60.050 euros
Pero ese detalle permite ofrecer un amplio habitáculo, donde la plaza central trasera es la mejor para tu peor enemigo. Aparte de ese detalle, nada que objetar, ni en materiales, acabados, ergonomía… Ni siquiera en multimedia, pues a esas pantallas y mandos te adaptas en cuestión de minutos.
Pero como es habitual en este segmento de vehículos, el precio lo aleja de todos aquellos que estén buscando una berlina para viajar al fin del mundo. Más aún si te digo que nuestro protagonista luce cerca de 30.000 euros en opciones.
