El Dacia Duster es de ese tipo de vehículos que siempre va bien. Lo decimos a nivel de ventas. Si la economía se contrae, vende; si todo va viento en popa, también. Y lo hace por su honestidad. No quiere aparentar lo que no es, aunque cada día parece menos ‘low cost’. En cualquier caso parece lógico que para afinar el precio renuncie a cosas, como rebajar algo la calidad o prescindir de todo aquello que no sea absolutamente necesario. Sin embargo, resulta cada vez más apetecible.
Nueva imagen corporativa Dacia
Uno de los puntos que ha ido ganando atractivo es el meramente estético. Para gustos los colores, pero es cierto que la marca se ha esmerado en matizar su imagen. Y más ahora con la incorporación de su nueva identidad corporativa, que se traslada también a la renovada red de concesionarios y al resto de modelos, como el Jogger Hybrid probado recientemente.
Vale que siempre habrá gente que critique detalles como unos asientos demasiados blandos que restan confort en largos desplazamientos, que los huecos no estén tapizados y suenen las cosas que dejamos, que la iluminación interior sea halógena, que los plásticos con que se remata el interior son duros, o que los cinturones de seguridad no contemplen regulación en altura, por ejemplo. Tampoco se rodea de tecnología de última hornada. De acuerdo.
Precio imbatible del Dacia Duster
Sin embargo, es de ley reconocer que todo se cuida ahora con más mimo, aunque sus bazas siguen siendo la fiabilidad, la robustez y el precio. Con este propulsor de gasolina de 130 CV y el acabado Journey Go, con entrega inmediata (algo a valorar actualmente) el precio se queda en 21.440 euros. Incluso podemos disfrutar de los 130 CV de nuestro propulsor de gasolina por 19.890 euros si apostamos por la línea Expression.
Quizás ahora los reproches sean ya menos. Y a cambio contamos con un propulsor de garantías, compartido con modelos de Renault, Nissan y ¡Mercedes! Se trata de un bloque de 1.3 litros con 4 cilindros que no resulta particularmente ruidoso al ralentí. Lo decimos por aquello de la insonorización.
Su rendimiento es más que aceptable y no desentona en ningún escenario. El vehículo no es demasiado grande ni pesado, por eso los 130 CV y 240 Nm de par máximo cunden, tanto para realizar largos cruceros por autopista, como a la hora de afrontar tramos menos confortables por carretera.
Las cifras registradas en nuestro centro técnico reflejan que realizar un adelantamiento en 4ª velocidad se traduce en 7,6 segundos y 212 metros, unos números muy aceptables.
El cambio manual de seis relaciones tiene un tacto y guiado digamos que también aceptable, y sólo la dirección se hace algo lenta con las 3,1 vueltas de volante que firma entre topes.
Dinámica correcta
El Dacia Duster se muestra confortable en marcha porque presenta una puesta a punto muy amable a nivel de suspensión. Dinámicamente también se defiende, aunque los balanceos de la carrocería son más evidentes que en algunos de sus rivales directos.
En este sentido su generosa altura al suelo (21 centímetros) le pasa factura. La tracción es delantera. Si queremos disfrutar de tracción total, ésta sólo se contempla con la versión diésel del 115 CV. Tampoco tiene opción esta variante mecánica que nos ocupa a una transmisión automática. Este exitoso SUV también se mueve con agilidad por pistas de tierra, pese a no tener ayudas electrónicas en este sentido. Se basa en su altura y robustez.
Interior aparente y amplio del Dacia Duster
En el interior no encontramos ‘lujos’ ni presentaciones grandilocuentes, pero todo resulta intuitivo y fácil de manejar. No es el colmo de la ergonomía delante y quizás las butacas delanteras se antojan algo blandas, pero detrás ofrece un espacio considerable; y la plaza central es más utilizable por confort que la que ofrecen otras opciones del mercado.
También el maletero, con 445 litros, dispone de un volumen más que correcto. Su terminación también es modesta y el piso no queda plano al abatir la segunda fila. Otro recorte…
Y en cuanto al equipamiento seguimos con la misma tónica. De serie contempla elementos como tarjeta manos libres, cámara multivisión, frenada de emergencia en ciudad, control del ángulo muerto, ayuda al arranque en pendiente, conectividad Apple CarPlay y Android Auto, climatizador, sistema de presión del aire en los neumáticos…
Alguna laguna justificada por el precio
Sí, faltan asistentes ADAS de última generación y algún elemento que nos haga más fácil la vida a bordo, pero no olvidemos sus raíces y la esencia, que casa con la de muchos conductores que sólo quieren lo justo y necesario para no tener que pagar más.
En definitva, el Dacia Duster siempre ha conectado con el público. Asimila que es un vehículo ‘low cost’, pero mejora cada día en lo tecnológico y en su imagen, más atractiva y moderna ahora con la llegada del nuevo logo corporativo. Este propulsor de gasolina de 130 CV resulta agradable y prestacional, aunque sigue siendo el precio su gran baza.