Prueba del Renault Scenic E-Tech 220 CV gran autonomía Iconic

El Renault Scenic es la prueba de que Renault es uno de los fabricantes generalistas más atrevidos, capaz de arriesgar y proponer nuevas soluciones que en ocasiones llegan a originar una auténtica revolución. Lo hizo con el primer Espace y con el Scénic, y ahora dobla la apuesta.

Antes incluso de lanzarse el primer Renault Mégane Scénic –que posteriormente perdería el nombre ‘Mégane’ y más recientemente la tilde en ‘Scénic’–, el prototipo Renault SCENIC proponía optimizar el espacio interior del automóvil y su accesibilidad de una forma que era de todo menos común en aquel lejano 1991.

SCENIC eran en realidad las siglas de “concepto de seguridad incorporada en un coche nuevo”, y aunque su diseño general difería bastante del elegido finalmente para aquel Mégane Scénic lanzado en 1996, no cabe duda de que su idea de ofrecer un habitáculo lo más amplio posible en un automóvil popular fue un rotundo éxito emulado por numerosos fabricantes.

El Renault Scenic se reinventa

Ahora, en su quinta generación, el Renault Scenic vuelve a reinventarse al desarrollarse sobre la versión mediana de la plataforma AmpR de Renault que, como su nombre sugiere, está planteada para adoptar únicamente sistemas de propulsión eléctricos. El Renault Scenic se ofrece, así, con un motor eléctrico ubicado en posición delantera transversal que puede entregar 170 CV o 218 CV, con baterías de 60 u 87 kWh, respectivamente.

Si el presupuesto no es problema, la configuración de mayor potencia y autonomía es claramente más atractiva, y es la que probamos hoy asociada al equipamiento más completo, denominado Iconic.

De entrada, su carrocería no responde al concepto de monovolumen, con un capó (primer volumen) bien separado del volumen principal, que engloba todo el habitáculo y el espacio de carga.

Tampoco es un hatchback o un familiar convencional, con una altura de 1,57 metros que le acerca a las proporciones de un SUV, pero en cualquier caso ofrece un formato muy práctico, suficientemente compacto (4,47 metros de longitud) como para desenvolverse sin problemas en entornos urbanos y lo bastante amplio como para poder trasladar a la familia son su correspondiente equipaje.

Nos gusta mucho el puesto de conducción, similar al estrenado por el Megane E-Tech en 2022, replicado también por los Austral y Espace. La interfaz multi-media basada en Android Automotive es todo un ejemplo de claridad, rapidez y practicidad. Hay abundantes ejemplos de buena ergonomía como el empleo del hueco que queda en el salpicadero tras el ángulo muerto de la parte superior derecha del volante para ubicar una tobera del climatizador en vez de una sección de la pantalla difícil de ver.

El Renault Scenic sigue siendo un gran vehículo familiar

Ese carácter familiar del nuevo Renault Scenic eléctrico se refleja en múltiples detalles. De entrada, ofrece una destacable accesibilidad, con una larga batalla (2,79 metros) que permite contar con amplias puertas tanto delante como detrás, puertas que presentan, además, un amplio ángulo de apertura, algo que agradecerán especialmente quienes manipulen sillas infantiles.

El interior es igualmente práctico y está excelentemente acabado. Al volante, ofrece muchas similitudes con los nuevos modelos de Renault desarrollados sobre la versión “grande” de la plataforma modular CMF (Espace VI, Austral y Rafale), algo que tiene su lógica, ya que la CMF está emparentada con la plataforma AmpR.

En cualquier caso, esa similitud es en realidad una virtud, ya que nos pone al volante de un puesto de conducción muy bien resuelto, con una impecable postura al volante, una instrumentación clara y de aspecto moderno, así como un sistema multimedia extraordinario: rápido, intuitivo, fácilmente legible y basado en la interfaz de Google, que (filias y fobias aparte) funciona a las mil maravillas.

Las plazas traseras son amplias, con una gran longitud para las piernas. Su postura se encuentra a medio camino entre la de un turismo y la de un SUV, dejando la cadera relativamente cerca del piso, pero lo cierto es que resulta fácil sentirse cómodo y no falta espacio. Cuenta además con soluciones ingeniosas, como un apoyabrazos central que incorpora soportes para vasos que sirven también para sujetar tablets.

En este acabado Iconic encontramos un equipo de audio firmado por Harman Kardon, volante calefactable, una tapicería específica de fibras sintéticas que da aspecto de buena calidad y función de masaje lumbar en el asiento del conductor

El Renault Scenic renuncia a algunos detalles de los Scénic

Dicho esto, los usuarios de generaciones precedentes de Renault Scénic pueden echar en falta mesitas retráctiles en los respaldos de los asientos delanteros, cortinillas en las ventanillas traseras, huecos de almacenaje bajo el piso (donde ahora se encuentra la batería), así como la posibilidad regular la distancia del banco trasero mediante guías y ampliar, así, el maletero de forma eventual.

Éste es bastante amplio gracias a su gran altura, si bien el umbral de carga queda demasiado elevado; un recurso que permite aumentar la rigidez de la carrocería sin incrementar la masa, que es también el motivo por el que los vanos de los maleteros son cada vez menos cuadrados y más ovalados.

Esa rigidez es en parte responsable del buen comportamiento dinámico del Scenic, que ofrece unas notables prestaciones, suavidad, confort, buen aislamiento acústico y una destacable autonomía. Si bien es cierto que los más de 600 kilómetros homologados son un valor difícilmente alcanzable en un uso real, podemos enfrentarnos sin problemas a viajes de más de 400 kilómetros, algo que –en el panorama actual– sitúa a este Scenic en una posición claramente ventajosa frente al grueso de sus rivales.

En conclusión, con más de 600 kilómetros de autonomía WLTP y una excelente habitabilidad, este Renault Scenic de 220 CV con batería de 87 kWh es ideal para viajar y tiene poca competencia. Cuesta en torno a 7.000 euros más que la versión de menor autonomía, pero merece la pena pagarlos.

Precio del Renault Scenic E-Tech 220 CV gran autonomía Iconic: 45.810 euros

Ficha técnica del Renault Scenic E-Tech 220 CV gran autonomía Iconic

Fotos de la prueba del Renault Scenic E-Tech 220 CV gran autonomía Iconic