Como ya explicamos, los inhibidores son aquellos sistemas que interfieren la señal del radar, impidiendo su correcto funcionamiento.
Por ello, con la reforma de la Ley que ha entrado en vigor y, por tanto, es aplicable, desde el pasado día 9 de mayo, quienes cometan este tipo de infracciones, consistentes en llevar en el vehículo un inhibidor de radares, serán sancionados con multa de 6.000 euros y la pérdida de 6 puntos.