Uno de los más deseados de la época era ese BMW Serie 3 con espectacular alerón trasero, logo M y mecánica acorde a su poderosa presencia; pero los más familiares Citroën BX y R-21 con motores de 120/125 CV también tenían su impronta deportiva.
Uno de los más deseados de la época era ese BMW Serie 3 con espectacular alerón trasero, logo M y mecánica acorde a su poderosa presencia; pero los más familiares Citroën BX y R-21 con motores de 120/125 CV también tenían su impronta deportiva.