La marca alemana iba a presentar en Fráncfort un modelo capaz de rivalizar en encanto y en prestaciones con los coupés más admirados. El 850i contaba con un motor de 12 cilindros, 300 caballos y 250 km/h… Y con una estampa capaz de provocar envidias a su paso. También se probaba la gama del Nissan Patrol, un todoterreno con todas las de la ley.