El mercado español del automóvil comenzaba a fijar la vista en modelos llegados de fuera y con mucho pedigrí. Así cuatro compactos deportivos de raza competían esta semana en nuestras páginas. Eso por no hablar de la fascinación de BMW, cuyo Serie 3 habíamos desmontado tras recorrer con él 15.000 kilómetros para conocer dónde estaban sus secretos.