El superdeportivo familiar de Audi se enfrentaba al legendario coupé de Porsche. Dos maneras de entender las prestaciones que compartían mucho más de lo que parecía. Audi sorprendía al mundo del automóvil con el primero de los RS, un familiar superdeportivo que se enfrentaba sin ningún tipo de complejos a todo un mito de los deportivos como el Porsche 911 Carrera. Ambos acaparaban una portada de lo más prestacional.