Es crucial que los conductores comprendan los sistemas de seguridad que sus vehículos equipan, sepan cómo funcionan y aprendan a configurarlos según sus preferencias. En 2016, Kia lanzó la submarca DRiVE WISE para desarrollar sistemas inteligentes de seguridad, y desde entonces, la gama de modelos de la marca ha avanzado significativamente en este campo, introduciendo alertas y asistentes innovadores.
Los sistemas avanzados de asistencia a la conducción (ADAS) ayudan a reducir muchos de los peligros y el estrés asociados con la conducción, permitiendo que el conductor se concentre más en disfrutar del viaje. Estas tecnologías apoyan al conductor en la eliminación de situaciones de riesgo o, en caso de que un accidente sea inevitable, minimizan sus consecuencias.
Para aprovechar al máximo estas tecnologías, es fundamental que los conductores adopten ciertas actitudes y conocimientos. Aquí presentamos algunas claves para lograrlo.
Kia es clara: asistir, pero sin reemplazar
El primer paso es entender que los sistemas de asistencia a la conducción están diseñados para ayudar, no para reemplazar al conductor. Estos sistemas no están hechos para que el conductor se desentienda de su responsabilidad al volante, sino para alertar de peligros y ayudar a evitarlos.
Incluso las tecnologías más avanzadas de DRiVE WISE, como el sistema de conducción autónoma en autopista HDP del Kia EV9 (aquí más información), que alcanzará el nivel 3 de autonomía en mercados seleccionados y permitirá la conducción en modo ‘manos libres’, requieren la atención constante del conductor. Aunque el conductor pueda retirar las manos del volante en determinadas situaciones, su vigilancia sigue siendo indispensable.
Saber cómo funcionan los asistentes ADAS
Es esencial que el conductor conozca los sistemas de seguridad de su vehículo, entienda cómo funcionan y sepa cómo actúan. Familiarizarse progresivamente con su funcionamiento en diferentes situaciones de conducción es clave para evitar sorpresas en momentos críticos.
La marca coreana está trabajando arduamente para que todos sus clientes salgan del concesionario con un conocimiento claro de las tecnologías de sus vehículos. Esta formación no se detiene en el momento de la compra, sino que se extiende durante toda la vida útil del vehículo.
Por ejemplo, el sistema FCA (Forward Collision-Avoidance Assist) alerta sobre riesgos de colisión frontal, asiste en la frenada si el conductor no aplica suficiente fuerza y puede frenar automáticamente si no hay respuesta.
En algunos modelos, el sistema incluye funciones adicionales como el giro en cruces (Junction Turning) y el tráfico cruzado en intersecciones (Junction Crossing), que advierten de riesgos de colisión con vehículos que se aproximan desde los lados.
Otro ejemplo es el control de crucero inteligente con control basado en la navegación (NSCC-C), que ajusta la velocidad del vehículo en las curvas y la restablece cuando las condiciones lo permiten. Conocer estas funcionalidades permite al conductor integrarse mejor con su vehículo y conducir de manera más segura.
Configurar los asistentes al gusto
Muchos sistemas de asistencia permiten ajustes para adaptarse a las preferencias o necesidades del conductor, accesibles a través de los ajustes del sistema de infoentretenimiento.
Por ejemplo, se puede ajustar la distancia y la capacidad de respuesta del Smart Cruise Control, así como el tiempo de aviso del sistema FCA. También se pueden configurar el volumen de las alertas y la activación del aviso háptico.
Convivir con los ADAS sin desactivarlos
Es beneficioso mantener activos los sistemas de asistencia al conducir. Es importante que los conductores aprendan a convivir con ellos y valoren la seguridad adicional que proporcionan. Las ayudas a la conducción pueden señalar que no se mantiene la distancia de seguridad adecuada, que se realizan cambios de carril sin señalizar o que se conduce sobre las líneas, todo lo cual puede ser indicativo de hábitos de conducción que deben corregirse.
Definitivamente, los sistemas avanzados de asistencia a la conducción representan una evolución significativa en la manera de conducir e interactuar con los vehículos. Sin embargo, requieren que los conductores se familiaricen con ellos y los utilicen de manera consciente y responsable.
Kia, a través de su submarca DRiVE WISE, ha logrado situarse a la vanguardia en este campo, desarrollando tecnologías que no solo mejoran la seguridad sino que también hacen la conducción más placentera y menos estresante.
El conocimiento y la correcta utilización de estos sistemas pueden marcar una gran diferencia en la experiencia de conducción y en la seguridad vial. Por ello, es fundamental que los conductores se eduquen sobre las capacidades y limitaciones de estos sistemas, configurándolos según sus necesidades y manteniéndolos activos para maximizar su efectividad.