Con un anticipo en forma de teaser (o “avance”, si no te gustan los barbarismos), Skoda nos da unas pistas del aspecto que lucirá el SUV eléctrico Enyaq tras su restyling (o “rediseño”) de mitad de ciclo comercial. Y es que el Enyaq comenzó a fabricarse en noviembre de 2020 en la fábrica de Mladá Boleslav, en la República Checa, si bien llegaría al mercado un año más tarde.
Este avance se hace público unos días antes de que se desvele la imagen definitiva del vehículo rediseñado, revelación programada para el miércoles 8 de enero, a las 09:00 de la mañana a través del canal oficial de YouTube de la marca checa.
Dos versiones y dos carrocerías para el “nuevo” Skoda Enyaq
Tanto el Enyaq con carrocería convencional como el Enyaq Coupé (con pilares C más inclinados) se presentarán junto con sus versiones SportLine. En todos los casos se introducirán “mejoras en el diseño exterior e interior, equipamiento de serie mejorado y diversas opciones de motorización”. Cabe destacar, no obstante, que no se esperan grandes novedades a nivel técnico, y que el SUV checo echará el resto en materia de diseño.
Según confirma el escueto comunicado previo al lanzamiento del renovado modelo, “tanto el Skoda Enyaq como el Skoda Enyaq Coupé incorporan ahora el nuevo lenguaje de diseño Modern Solid de la marca, con un llamativo frontal con un Tech-Deck Face negro brillante, Light Band y faros LED matriciales de nuevo diseño”.
El Skoda Enyaq mejorará su autonomía
El comunicado menciona también que el renovado Enyaq “ofrece una autonomía ampliada, gracias en parte a una aerodinámica optimizada, junto con materiales más sostenibles y un amplio equipamiento de serie”. Cabe recordar que el coeficiente de penetración aerodinámica del actual modelo es de 0,26, valor que en la variante RS sube a 0,27. Por su parte, el Enyaq Coupé registra un Cx de 0,24 y 0,25 para las versiones normales y RS, respectivamente.
Gracias a esta diferencia, las versiones Coupé consiguen homologar entre seis y once kilómetros más que las dotadas de carrocerías convencionales, por lo que una mejora de otro par de décimas en el coeficiente de penetración aerodinámica y los habituales ajustes en la gestión de la energía que los fabricantes van implementando a lo largo de la vida de sus modelos podrían hacer que el Enyaq más eficiente se acercara a la barrera de los 600 kilómetros de autonomía homologada.
En cualquier caso, lo que parece seguro es que los SUVs eléctricos grandes del fabricante checo seguirán contando con baterías de 82 kWh brutos (77 kWh útiles) y motores que partirán de los 286 CV, si bien siempre existe la posibilidad de que las versiones RS experimenten un incremento de potencia que les permita superar los actuales 340 CV para rivalizar con las propuestas chinas que llegan al mercado anunciado niveles de potencia más elevados; un Seres 5, por ejemplo, ofrece 585 CV por menos de 70.000 euros, mientras que un BYD Sealion 7 presume de 530 CV desde poco más de 50.000 euros.
No se trataría en realidad de una necesidad de mejorar sus prestaciones, ya que el actual “cero a 100” en 5,5 segundos del que presume el Enyaq RS es una cifra suficientemente brillante, y la velocidad punta de 180 km/h tampoco debería moverse demasiado, teniendo en cuenta que el VW ID.5 GTX (su modelo mellizo) empata en este registro, si bien Cupra, con la misma plataforma y similar cadena cinemática pero con “sólo” 326 CV, llega a los 200 km/h con su Born VZ.
