Está claro que gracias a los 2.000 caballos de potencia y a los 1.700 Nm de par motor que proporcionan los cuatro motores eléctricos que emplea el impresionante bólido de Hethel, esta criatura es capaz de generar prestaciones de infarto.
Pero todo ello no sería posible sin una elaborada aerodinámica como explica Richard Hill, el jefe de aerodinámica de la casa británica. Tanto que asegura que el Lotus Evija no corta el aire, sino que tiene la particularidad de absorberlo.
Eso es gracias a su difusor delantero, el cual canaliza el aire para refrigerar sus baterías a la vez que acelera el aire que pasa por debajo del vehículo. Eso se combina con un alerón trasero activo y con función DRS. Y aunque Lotus no ha desvelado su coeficiente aerodinámico, o su carga, ten por seguro que sus valores lo posicionarán entre los mejores de su categoría.